*»Señores: No confundan espíritu pacifista con sumisión. Nos vuelven a agredir, vuelven a ultrajar nuestro territorio, y la respuesta ya no será diplomática, será militar y sabremos responder. No jueguen con fuego, ya basta»*, dijo Correa en su informe semanal de labores.

El mandatario recordó que el jueves alertó a los militares sobre los dichos del aspirante oficialista, quien durante un debate televisivo, el domingo pasado, también afirmó que *»hay que «perseguir a los terroristas allá donde estén»*.

*»Yo no quiero meterme en política interna (de Colombia), somos respetuosos de otros países, pero sí vamos a defender la dignidad y la respetabilidad»* de Ecuador, indicó, tildando las declaraciones de Santos de *»horror, irrespeto e insensatez»*.

Siendo ministro de Defensa, Santos autorizó el bombardeo colombiano contra una base clandestina de las FARC en la zona fronteriza de Angostura (Ecuador) el 1 de marzo de 2008 con saldo de 25 muertos, entre ellos el número dos de esa guerrilla, Raúl Reyes.

Ese ataque derivó en la ruptura de relaciones entre Bogotá y Quito hasta noviembre pasado, cuando fueron restablecidas parcialmente.

Correa denunció una *»contradicción»* entre las advertencias del ex ministro, *»para ganar unos cuantos votos»*, y la postura oficial de Colombia que *»pidió perdón»* y prometió a la comunidad internacional no *»volver a agredir a un país hermano»*.

Asimismo, reiteró que si se aplicara la doctrina de Santos, la más afectada sería Colombia, pues sus vecinos se arrogarían el derecho de atacar a los irregulares que delinquen en el extranjero y se refugian en ese país.

© ANP/AFP