Carta enviada al Presidente Lula en la segunda semana de marzo, firmada por representantes de las ocho organizaciones brasileñas que crearon el Foro Social Mundial en enero de 2001.
La campaña mundial en defensa de la libertad del camarada Prabir se une a la campaña por la liberación de Assange y tendrá una nueva carta dirigida al Secretario General de la ONU, António Guterres.

 

Estimado presidente Lula,

Quienes le escribimos somos viejos compañeros. Somos miembros del grupo que creó el Foro Social Mundial y ayudó a difundirlo por todo el mundo. Nos ponemos en contacto para comunicar un asunto grave y solicitar su apoyo. El periodista indio Prabir Purkayastha, uno de los organizadores del Foro Social Mundial en la India en 2004, está actualmente encarcelado a los 78 años. Ha estado detenido durante tres meses por el régimen del primer ministro Narendra Modi. Esta prisión es de naturaleza política. Su objetivo es silenciar a Newsclick, una publicación democrática favorable a los movimientos sociales, creada y dirigida por Prabir. Se basa en una ley ultraautoritaria, previamente declarada como un ataque a la Declaración Universal de Derechos Humanos por los relatores de la ONU. Dado que India, junto con Brasil, está presente en los BRICS, creemos que usted puede contribuir a rectificar esta injusticia y este atentado contra las libertades políticas.

Usted reconocerá, presidente, similitudes entre la prisión de Prabir y su propia detención arbitraria e infame. La orden de detención se basa en un hecho trivial: un artículo de periódico. El 5 de agosto del año pasado, The New York Times publicó un artículo sobre una supuesta red internacional de medios que apoyaba a China. Se decía que era patrocinada por un millonario estadounidense, Neville Roy Singhan, quien se había enriquecido durante el auge de las plataformas de internet y supuestamente decidió apoyar publicaciones con posiciones editoriales favorables a Beijing. Note la hipocresía, presidente. Los medios de comunicación favorables a los grandes grupos económicos reciben constantemente inundaciones de dinero, de empresas locales e internacionales interesadas en mantener el statu quo. Sin embargo, producen «informes» falsos para quejarse de que un solo hombre rico supuestamente decidió fortalecer a quienes piensan diferente.

La prisión de Prabir inicialmente debería durar 6 días, pero se ha extendido desde el 3 de octubre y puede continuar indefinidamente. En agosto de 2014, el Congreso indio aprobó una enmienda a la Ley de Prevención de Actividades Ilegales (UAPA, por sus siglas en inglés) de manera sumaria (24 días de procesamiento en ambas cámaras legislativas). Establecida desde 1963, fue completamente desfigurada. El nuevo texto permite al gobierno designar grupos o individuos como «sospechosos de terrorismo». Las «pruebas» pueden ser tan frágiles como las que victimizaron a Prabir. Pero los ciudadanos identificados como sospechosos son mantenidos en custodia durante la duración de las «investigaciones».

Las detenciones «preventivas» se van extendiendo hasta que se convierten en penas sin juicio. Los datos del propio gobierno indio señalaron, en 2022, el encarcelamiento político masivo resultante de esta disposición. En cuatro años, 24.134 personas habían sido arrestadas bajo la UAPA. De ellos, solo 589 fueron llevados a juicio (386 de los cuales fueron absueltos). 23.545 permanecieron encarcelados, o el 97.5% del total…

La ley también autoriza el decomiso de los bienes de las personas bajo investigación, lo que ya ha ocurrido con la publicación dirigida por Prabir, Newsclick. En vísperas de Navidad de 2023, las cuentas bancarias del periódico fueron congeladas. Los salarios y otros compromisos no se han pagado desde entonces. El intento de sofocación es evidente.

El gobierno indio quiere castigar a Prabir por su éxito. Fundado en 2009, Newsclick ha logrado una gran audiencia e impacto. Ha producido noticias y análisis convincentes sobre eventos en India y el mundo, abogando por una interpretación claramente antineoliberal. También se alió con importantes movimientos sociales, como la gran protesta nacional de agricultores de 2020-2021. Esta lucha resultó en la derrota más severa sufrida por Modi en diez años de mandato, obligándolo a abandonar un conjunto de contrarreformas que amenazaban la producción campesina y entregaban el campo a las corporaciones.

La trayectoria de Prabir ha estado marcada durante más de 50 años por las luchas sociales y el deseo de construir un mundo más justo. Recordará, presidente, un evento destacado protagonizado por él. En diciembre de 1984, Prabir y un colega, entonces jóvenes ingenieros, informaron al mundo sobre la tragedia de Bhopal. Fundadores, en 1978, del Foro de Ciencia de Delhi, fueron convocados para investigar el desastre en un antiguo almacén de Union Carbide, donde se producían pesticidas. La negligencia de la multinacional estadounidense había favorecido, descubrieron, el escape de una sustancia altamente letal: el isocianato de metilo. La sombra de la muerte se extendió sobre la ciudad. Alrededor de 20,000 personas fueron envenenadas y murieron en las horas y días siguientes. Otras 600,000 sufren secuelas hasta el día de hoy.

Prabir se graduó en Ingeniería en las universidades de Calcuta y Allahabad. Se unió al Partido Comunista de India desde 1970. Ingresó, en 1975, en la Escuela de Computación y Ciencias de Sistemas de la Universidad Jawaharial Nehru. Trabajó en los sectores de informática y energía durante más de 40 años y participó en comités del Estado indio relacionados con estos temas. En su libro autobiográfico recientemente lanzado, «Manteniendo la buena lucha», ya con el autor encarcelado, escribe: «Descubrí que tenía tres ‘pasiones’ y que siempre viviría con ellas: Ciencia, Tecnología y, por supuesto, Política. Solo con el tiempo se hizo evidente cómo se combinarían en las décadas siguientes».

Las pasiones se combinaron en la lucha incansable de Prabir por liberar el conocimiento de las barreras mercantiles que limitan su circulación. Entre otras iniciativas, articuló en India el movimiento internacional Knowledge Commons, que propone alternativas al concepto y mecanismos de «propiedad intelectual», y la Fundación del Software Libre.

Prabir, a punto de cumplir ochenta años, no tira la toalla. Rechaza ser considerado víctima. En sus memorias, explica: «La victimización nos roba el papel de participantes en la creación de la historia. Nos reduce a simples objetos. En su lugar, me gustaría asumir la perspectiva de las personas que hacen la historia. Sí, los gobiernos de turno controlan poderes que parecen empequeñecer a los individuos y sus organizaciones. Pero es el pueblo y sus acciones quienes, al final, determinan la Historia; no como y cuánto quisiéramos, sino de formas que ni el pueblo ni sus gobernantes pueden anticipar».

Y concluye, con una fina ironía: «Soy tan viejo como la república india. En mis más de 75 años de vida, he aprendido una cosa o dos, tal vez hasta tres. Aprendí cómo puedo ser parte de mi país, rico y diverso, y al mismo tiempo parte de un mundo aún más grande, más complejo y fascinante. Todo lo que necesito hacer es luchar por un mundo mejor para tod@s».

Este ser humano, Prabir Purkayastha, necesita estar libre, presidente Lula. Una palabra suya dirigida a Narendra Modi puede marcar la diferencia.

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