Cinco años después de la Crisis de Los Misiles en Cuba (1962) América Latina y el Caribe se transformó en la primera Zona Libre de Armas Nucleares, logrando que las potencias nucleares tomaran el compromiso de no agresión ni amenaza nuclear en la región y propiciando la desnuclearización armamentística a nivel global.

Si bien son muchos los países que al día de hoy han firmado el Tratado sobre la Prohibición de Armas Nucleares, las principales potencias nucleares no lo han hecho.

Ayer Qiu Xiaoqi, representante especial de asuntos para América Latina del Gobierno de China, en una rueda de prensa dada en el Salón diplomático para la prensa latinoamericana, respondió a las preguntas de Pressenza sobre el tema nuclear.

El Sr. Qiu respondió: “En Enero del 2022 los dirigentes de los cinco estados poseedores de armas nucleares han dado a conocer una declaración conjunta para prevenir el conflicto atómico destacando que en ella no hay ganadores y no se puede desencadenar una guerra de ese tipo.

El Presidente Xi Jingping también ha destacado en ocasiones reiteradas que: No se puede desencadenar una guerra nuclear y tampoco usar armamento atómico.

A partir del año 1964, en que China realizó el primer experimento de bomba atómica de forma exitosa, la postura de China al respecto es consecuente y bien clara: China no usará primero las armas nucleares. Tampoco amenazará con armas nucleares a países o regiones sin armas nucleares.

Durante mucho tiempo el arsenal nuclear de China se mantiene al mismo nivel para satisfacer la salvaguardia de su seguridad propia. Nunca participamos en ninguna carrera armamentista nuclear.

A nuestro juicio la comunidad internacional debe trabajar unida a fin de impulsar la resolución adecuada a los temas candentes vinculados al tema nuclear, por vía diplomática y por vía política. China apuesta por una visión de seguridad común, cooperativa, integral y sustentable. Al mismo tiempo queremos responder a los desafíos y riesgos en materia de seguridad, tanto convencionales como no convencionales, con una mentalidad de beneficios y ganancias compartidas, de esta forma queremos mitigar la conflictividad bélica en diferentes regiones dando más estabilidad a esta época turbulenta y convulsionada”.

Hasta aquí las respuestas respecto del tema nuclear, que a Pressenza interesaban.

Foto de Juan Carlos Otero