Por Alfredo Seguel

Un estudio revisó más de 50 publicaciones científicas sobre la rentabilidad y viabilidad del hidrógeno verde, concluyendo que es más costoso e ineficiente en comparación a otras alternativas

Hidrógeno Verde tambalea: Estudio cuestiona su eficiencia frente a otras alternativas

Europa ha centrado sus esfuerzos en el hidrógeno verde como “la alternativa” para la transición energética, buscando reemplazar el gas en los hogares, teniendo como principales proveedores, países de América, como Chile, según acuerdos comerciales con la Unión Europea.

Sin embargo, la viabilidad de este combustible es cuestionada por diversas voces críticas. Un estudio publicado en Cell Reports Sustainability revisó más de 50 publicaciones científicas sobre la rentabilidad del hidrógeno verde, concluyendo que es más costoso e ineficiente que las bombas de calor eléctricas para sustituir las calderas de gas, información que es desclasificada por una reciente publicación en el medio Publico.es, escrito por Alejandro Tena, titulado: “La ciencia pincha la burbuja del hidrógeno verde”.

El análisis de las publicaciones académicas, según la publicación, resalta que las calderas de hidrógeno son entre cuatro y seis veces más ineficientes que las bombas de calor eléctricas, desestimando su papel en la transición energética de los hogares. Además, se cuestiona la adaptación de las infraestructuras de transporte de gas al hidrógeno verde, ya que las tuberías no están preparadas para su alto flujo. La producción actual de hidrógeno sostenible es solo el 1%, mientras que el 95% proviene de gas fósil, marcando la cadena de valor con una fuente contaminante.

La publicación de Alejandro Tena, también resalta que la producción de hidrógeno verde requiere un aumento significativo de la energía renovable, ya que se realiza mediante electrólisis con electricidad generada por fuentes fotovoltaicas o eólicas. Datos de Hydrogen Science Coalition indican que para satisfacer la demanda actual de calefacción se necesitarían 149 GW de capacidad instalada de turbinas eólicas, mientras que las bombas de calor requerirían solo 25GW adicionales.

Jan Rosenow, director para Europa del think tank energético Regulatory Assistance Project, destaca que ninguno de los 54 estudios independientes sugiere que el hidrógeno para calefacción tenga un papel importante en el futuro. Rosenow subraya que el hidrógeno es una opción más cara y menos eficiente que alternativas probadas, como las bombas de calor y la calefacción urbana.