El transporte siempre ha sido un reto para las grandes ciudades, especialmente cuando se trata de equilibrar las necesidades de la población y el medioambiente. Los vehículos chinos de nueva energía han permitido a Santiago, la capital chilena, resolver este reto proporcionando un transporte más ecológico a sus habitantes.
La capital chilena se ha lanzado a la electromovilidad. Ya hay 2.000 autobuses eléctricos en toda la ciudad, la mayor flota del mundo después de la de Shenzhen, en el sur de China.
Recientemente, con motivo de los Juegos Panamericanos de 2023, celebrados en Santiago, se han incorporado a la flota 10 autobuses eléctricos de dos pisos fabricados en China, que transportaron a los pasajeros desde y hacia el Estadio Nacional.
Santiago lleva mucho tiempo luchando contra la mala calidad del aire, por lo que la flota de autobuses eléctricos de bajas emisiones ayudará a hacer frente a la contaminación.
De hecho, hay planes que la flota alcance los mil autobuses eléctricos más para finales de 2026.
Eso significaría que cerca de la mitad de los autobuses de Santiago serían eléctricos.
El gobierno del presidente Boric también está impulsando planes de electromovilidad en otras ciudades chilenas, donde ya circulan autobuses eléctricos.

Actualmente hay 23 puntos de recarga repartidos por toda la ciudad, que ayudan a proporcionar energía más limpia y a reducir la contaminación acústica y las emisiones.
«Hacemos rutas largas, y con una sola carga podemos hacer dos viajes en un día y aún nos queda alrededor de un 30 % de carga en el autobús. Esto equivale a unas ocho o diez horas de conducción», dijo Luis Hermosillo, el conductor.
La mayoría de los autobuses son de fabricación china y disponen de aire acondicionado, puntos de carga USB, pago por código QR e incluso Wi-Fi.
«China es nuestro mayor proveedor de autobuses eléctricos. Tenemos un sistema en el que los operadores privados compran e incorporan los autobuses a la red. Las empresas y buses chinos han sido grandes colaboradores para facilitar este avance de la electromovilidad en Santiago», indicó Jorge Daza, el subsecretario de Transportes.
Para 2026, el gobierno espera tener 3.500 buses eléctricos operando en todo el país.
A medida que el transporte público se moderniza, los pasajeros disfrutan de la comodidad de esta nueva generación de autobuses eléctricos.

El artículo original se puede leer aquí