Por Leonardo Buitrago

Desde la Coordinadora Feminista Punta Arenas, Elisa Giustinianovich, planteó que existe una amplia mayoría que se ha manifestado en contra del denominado Acuerdo por Chile pactado por los partidos tradicionales con representación en el Congreso, lo que deviene en una posición de desconfianza, vigilancia y denuncia en torno a su juicio, al carácter excluyente y antidemocrático en el diseño de este segundo proceso constitucional.

Entre el 28 y 29 de enero se llevó a cabo el V Encuentro plurinacional de mujeres y disidencias que luchan, con el fin de preparar el próximo 8 de marzo y las movilizaciones 2023 posterior al plebiscito constitucional.

El evento desarrollado de manera presencial en la Universidad de Santiago (USACH)  reunió a más de 40 organizaciones desde Arica a Punta Arenas, con el afán de reorganizar y repensar las estrategias de trabajo. A dos meses de un nuevo 8M y la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado en Chile.

En el encuentro, las representantes de las distintas organizaciones feministas plantearon las ideas y estrategias para avanzar y no retroceder en  las demandas más urgentes de la colectividad.

Asimismo, coincidieron en manifestar que se mantendrán en estado de vigilancia frente al desarrollo del nuevo proceso constituyente.

Desde la Coordinadora Feminista Punta Arenas, Elisa Giustinianovich, planteó que existe una amplia mayoría que se ha manifestado en contra del denominado Acuerdo por Chile pactado por los partidos tradicionales con representación en el Congreso, lo que deviene en una posición de desconfianza, vigilancia y denuncia en torno a su juicio, al carácter excluyente y antidemocrático en el diseño de este segundo proceso constitucional.

“No vimos ningún ánimo (en las feministas) en disputar con primeras personas las elecciones por venir porque prácticamente es una pérdida de tiempo. Sin embargo, eso no significa que nos vayamos a restar o excluir, esa es una decisión que se está discutiendo en todos los territorios porque es posible también que puedan tejerse algunas alianzas desde fuera en caso de que por medio de los partidos políticos, logren entrar integrantes del movimiento feminista con las cuales podamos tener alguna vía de comunicación” explicó, citada por Radio U de Chile.

Por su parte, la vocera de Ni Una Menos, Elena Dettoni, planteó misma observación que se hizo al anterior proceso desarrollado por la Convención Constitucional, referente a alcanzar una postura mancomunada de acción al interior del movimiento feminista.

“Todo depende de si nosotras nuevamente lográramos articular una fuerza movilizadora como se logró instalar durante el primer ensayo, pero si corriéramos por colores propios, entonces no. Estamos abiertas y receptivas de articularnos si es que hay debate, no nos estamos restando a priori” dijo Dettoni, al tiempo que insistió en la necesidad de sacar voces para enfrentar la arremetida de la ultraderecha y sectores ultraconservadores anti derechos.

Cabe recordar que en diciembre la Red de Mujeres Mapuche emitió una declaración que expresaba su desaprobación al “Acuerdo por Chile” y la exigencia de una nueva convocatoria.

Su representante, quien también participó en el encuentro, Yanka Millapán, indicó que se permanecerá movilizada en las calles hasta saber cómo será la apertura hacia las primeras naciones, pues entre sus demandas prioritarias está el reconocimiento de un Estado Plurinacional, la desmilitarización del Wallmapu y la defensa de la biodiversidad.

“Este nuevo acuerdo no nace de una consciencia de pueblo y no nos sentimos representados, tampoco se sabe cómo será la participación de los pueblos originarios ya que no va haber una consulta indígena y ni se habla de sus cupos. Es un tema que por lo visto no les preocupa a las personas que lo redactaron”, afirmó.