POEMA

 

 

 

 

Cuando el silencio

invade la madrugada

y los pájaros duermen

en dulces ramas,

la voz del poeta

con sus lindas palabras

el papel blanco

con fuerza raya

buscando sueños

en la dulce morada.

 

A veces la soledad

ungida en la esperanza,

niebla mis ojos

cada vez más cansados

de tantas batallas.

 

Quiero decir tanto

que en el camino quedan

charcos de versos,

recuerdos guardados

en mil besos,

lápices gastados

en plumas blancas

y doradas.

 

Poeta cantor

de la noche callada,

tuyas son las teclas

que afinan la llegada

de un nuevo día

de luces sagradas.

 

Tuyas son ese amor

que marchó por la explanada,

que subió al cielo

buscando una morada.

 

Nunca dejes de soñar.

Busca senderos

en la cañada,

escala montañas

con nieve clara,

navega por el mar

de agua salada

y busca la inmensidad

en cada encrucijada.

 

Así hallarás

los más hermosos versos,

las flores más bellas,

la historia jamás contada,

los pétalos de esperanza

y las lágrimas bañadas

en ríos cristalinos

color esmeralda.