POEMA

 

 

 

Ese olor a pasto,

a birushe,

flores del campo

y aroma a tierra mojada

que trae el viento de los cerros.

 

Ese aire que recorre mi cuerpa,

que seca el sudor que agota,

que despeina mis cabellos rebeldes,

y llena mis pulmones de esperanza.

 

Ese movimiento que transforma,

que acomoda mis huesos dislocados,

que desata los nudos cerebrales,

que me hace despensar

y disfrutar.

 

Recorriendo caminos nuevos

Dejando rastros de mi historia

Abriendo nuevas memorias

Rastreando vidas diversas.

 

Pisando terrenos inquebrantables

Dejando huellas de mis rastros

Pensando que el hoy es instante

Y que esos instantes se agotan cuando despiertas.

 

Pedalear te abre caminos

Te hace olvidar que eres tiempo

Te guía por nuevos descubrimientos

Te trae el olor a noviembre

Te hace recordar que viajas con ancestras,

quienes pronto habrán de venir,

rodeadas de flores de cempasúchil,

caña y tejocotes,

a comer chocolate con pan de yema.