POEMA

 

 

 

 

Las olas se lamentan,

rugen, cantan

baladas tristes,

historias perdidas

en mares hundidos,

espuma blanca,

gritos ahogados

y vidas que se marchan

en la nada.

 

Inquietas las olas lloran

ante la arena clara

y tal como vienen

se van,

retroceden al mar

y se esconden

bajo esa concha

en busca

de la huida paz.

 

En Tierra queda la mirada,

un corazón partido,

una lágrima

que al caer, limpia la herida

y se funde con las olas

en espuma y esperanza,

en un dolor

que atrapa mi alma,

en una ilusión

que se evapora

por el beso del sol.

 

Y allí se queda la ola,

con lamento,

y así me quedo yo,

con tristeza…

sin aliento…