El 20 de enero, Dinh Thi Thu Thuy se convirtió en la última mujer activista en Vietnam en ser condenada a prisión. Thuy, ingeniera acuícola y ambientalista del delta del río Mekong, había criticado una serie de políticas gubernamentales en Facebook, y fue arrestada en abril de 2020. Thuy fue sentenciada a siete años de prisión por solo cinco publicaciones que recibieron 130 Me Gusta y que fueron compartidas 80 veces. Antes de su juicio, que duró apenas cuatro horas, Thuy permaneció ocho meses en prisión preventiva, durante los cuales no pudo contactarse con su familia, ni siquiera con su hijo de 10 años. Su detención fue difícil. Debido a las malas condiciones de los centros de detención, Thuy tuvo problemas cardíacos y fue hospitalizada. Thuy es una de las tantas valientes mujeres vietnamitas que han pagado un alto precio por el simple hecho de expresar su opinión.

Actualmente, hay 241 activistas vietnamitas en prisión, entre hombres y mujeres. Thuy es una de las 21 activistas femeninas que cumplen sentencia, mientras que seis más se encuentran en espera de juicio. Tres mujeres han sido exiliadas del país a cambio de libertad anticipada. The 88 Project estima que al menos otras 55 mujeres se encuentran en riesgo de persecución. Aunque hay un número considerablemente mayor de activistas masculinos, es interesante notar que entre los opositores más famosos de Vietnam hay muchas mujeres. La bloguera Nguyen Ngoc Nhu Quynh, también conocida en Occidente como “Mamá Hongo”, atrajo la atención internacional en 2017 luego de que el Departamento de Estado estadunidense le otorgó el Premio Internacional a las Mujeres de Coraje, tras su arresto un año antes. Quynh fue arrestada por sus publicaciones en línea, que puso en relieve la violencia policial, la corrupción y el desastre ecológico de Formosa de 2016. Quynh fue condenada a 10 años de prisión en 2017, pero fue puesta en libertad un año después y se exilió en Estados Unidos.

La estrella pop Mai Khoi, una de las músicas más populares de Vietnam, ha usado su plataforma para promover los derechos LGBT, el feminismo y la libertad de expresión. Khoi saltó a la fama en 2010, cuando ganó la Canción y el Álbum del Año de Vietnam Television, pero se desilusionó cada vez más con la falta de libertad artística y política en el país. En 2016, intentó sin lograrlo postular como candidata independiente en la Asamblea Nacional. Ese mismo año, durante la visita de Barack Obama al país, Mai Khoi se reunió con él para discutir los derechos humanos en Vietnam. Sus francas declaraciones llamaron la atención de las autoridades, y fue detenida por ocho horas en el aeropuerto de Hanói cuando volvía de un viaje por Europa en 2018. En 2019, Mai Khoi fue la protagonista de un documental internacional. Ahora vive en Estados Unidos debido al acoso constante.

En Vietnam, los hombres aún dominan la política. De los 18 integrantes del Buró Político, solo hay una mujer, mientras que de 200 miembros, solo 19 son mujeres en el Comité Central (CC). Hay más representación femenina en la Asamblea Nacional, pero el verdadero poder político se encuentra en el Buró Político y el Comité Central. La activista y periodista Pham Doan Trang contó a 88 Project en 2019 que el activismo político no solo es una lucha contra la dictadura, sino también una lucha contra los límites de la sociedad patriarcal vietnamita.

«Las mujeres no solo son víctimas del régimen en términos políticos, sino también de la desigualdad de género y de la autolimitación”, explicó. “Las mujeres se limitan ellas mismas al pensar que no están aptas para una carrera política, que la política es cosa de hombres… Por lo tanto, debemos convencernos de que nuestra lucha no es solo contra la dictadura, o para liberar a Vietnam del régimen. Es también una lucha para liberarnos a nosotras de nuestras propias barreras ideológicas, de los prejuicios que nos imponemos a nosotras mismas”.

Pham Doan Trang fue arrestada en octubre de 2020 luego de años de acoso, y ahora está en espera de su sentencia. Fue imputada por “propaganda contra el Estado” de acuerdo con el A}artículo 117 del Código Penal de 2015. El artículo 117 se usa con frecuencia para encerrar a activistas que critican al régimen.

El aporte de las activistas mujeres es aún más impresionante cuando se tiene en cuenta la falta de representación femenina en la cumbre de la política vietnamita. La mayoría de los activistas en Vietnam siguen siendo hombres, pero esto solo destaca aún más el impacto de las mujeres. Son mujeres como Nguyen Ngoc Nhu Quynh, Pham Doan Trang y Mai Khoi quienes han logrado que la comunidad internacional se interese en los derechos humanos en Vietnam.

Aún así, no todas las mujeres han alcanzado el mismo nivel de reconocimiento internacional, y eso es justamente lo que busca el Partido Comunista (VCP). Aunque la libertad de expresión es un derecho protegido por la Constitución, las críticas al régimen no son toleradas. Según Reporteros Sin Fronteras, solo cinco países en todo el mundo tienen menos libertad de prensa que Vietnam. Hasta Irán y Arabia Saudita cuentan con una prensa más independiente. Luego del XIII Congreso del Partido, llevado a cabo en febrero, no parece que esta situación vaya a cambiar pronto.

El Comité Central tomó la inusual decisión de reelegir al actual Secretario General, Nguyen Phu Trong. Trong es un conservador de línea dura y ha sido el encargado de supervisar el incremento en la represión, especialmente desde su primera reelección en 2016. Apenas semanas antes del inicio del Congreso, tres miembros masculinos de Periodistas Independientes de Vietnam fueron condenados a penas de prisión de 11 a 15 años por su trabajo. Como Pham Doan Trang, fueron acusados de “propaganda contra el Estado”.

En abril de 2020, Vietnam instó a Facebook a censurar y eliminar contenido que no estuviera aprobado por el VCP. Podría haber sido una respuesta a las acciones de activistas como Dinh Thi Thu Thuy, quien había usado la plataforma para criticar las políticas gubernamentales. El VCP ciertamente teme la influencia de las redes sociales.

Los acontecimientos que se han estado desarrollando en Myanmar son una muestra del poder que las redes sociales tienen para impulsar y organizar protestas políticas. Pero no hay mucha posibilidad de que las protestas en Myanmar se repitan en Vietnam en un futuro cercano. Al menos a corto plazo, el futuro de Vietnam parece un poco más predecible. El régimen seguirá censurando la libertad de expresión y encerrando a los disidentes. Las mujeres activistas de Vietnam seguirán resistiendo.


Este artículo se publicó originalmente en The 88 Project, portal independiente de noticias de Vietnam. Global Voices republica una versión editada como parte de un acuerdo de intercambio de contenidos.

 

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