El problema lo tienen los acreedores si nos negamos a pagar una deuda que no hemos generado, según Losada, y anima a empoderarse y replicar el ejemplo de Islandia.

En esta entrevista, Vicente Losada explica detalladamente el mecanismo de generación de deuda que siendo, en origen privada, termina convirténdose en pública. Lo que se traduce en recortes en servicios públicos: sanidad, educación, pensiones, Ley de Dependencia…

Vídeo: Álvaro Orús

Audita Sanidad es un colectivo ciudadano independiente que forma parte de la Plataforma por la Auditoría Ciudadana de la Deuda. Se trata de una de las organizaciones que más está avanzando en la auditoría de la deuda – en su caso en sanidad-, contraída por distintas administraciones públicas (estatal, autonómica y municipal) y cuyo origen -como están demostrando- es privado.

Ante esto, Vicente Losada, portavoz de Audita Sanidad se pregunta «¿Por qué hemos de pagar la deuda que ha contraído una minoría? Es como si un vecino pide un préstamo, se extralimita y no puede pagarlo, y me dicen que lo pague yo».

La función de este colectivo como de toda la Plataforma por la Auditoría de la Deuda es tratar de concienciar a la población de que la mayor parte de la deuda española es privada pero la han reconvertido en pública y eso se manifiesta en recorte de servicios públicos: pensiones, educación, sanidad, Ley de Dependencia, etc.

Losada insiste en que en el tema de la deuda, el problema lo tienen los acredores, aunque nos hagan creer que lo tenemos nosotros cuando nos amenazan si no se paga. Y pone como ejemplo a Islandia, un país que se negó a pagar la deuda que -como ocurre en todos los países- la mayoría de la población no había generado y no pasó nada.

En esta entrevista, Vicente Losada explica a través de la deuda en sanidad cómo funcionan los mecanismos de la deuda y la necesidad de empoderarnos y negarnos a pagar una deuda que no hemos generado.

Audita Sanidad está reclamando -a partir de informes que ha ido emitiendo periódicamente- que distintos organismos investiguen la legitimidad de la deuda y algunos ya han aceptado hacerlo.