Cuando un títere de la CIA intenta un golpe militar respaldado por la CIA, con el apoyo de John Bolton y la oferta de los mercenarios de Blackwater, en el país con las mayores reservas de petróleo del mundo, no tengo ninguna dificultad para saber de qué lado estoy.

Juan Guaidó ha sido preparado durante 15 años como un proyecto a largo plazo de la CIA. Su intento de golpe de Estado de ayer, que hasta ahora parece haberse paralizado, fue la culminación de estos esfuerzos por devolver las reservas petroleras de Venezuela a la hegemonía estadounidense.

Es extraño cómo la implementación urgente de la democracia liberal por la fuerza se correlaciona tan a menudo con reservas de petróleo ajenas a los EE.UU., como en Libia, Irak o Venezuela, mientras que los países con reservas masivas de petróleo que permiten la dominación militar de los EE.UU. y se alinearon con Occidente e Israel pueden ser tan antidemocráticos como deseen, por ejemplo Arabia Saudita. Venezuela es una democracia imperfecta, pero es mucho, mucho más democrática que Arabia Saudita y con un historial de derechos humanos mucho mejor. La hipocresía de los medios de comunicación y los políticos occidentales es impresionante.

La hipocresía y la ironía son almas gemelas, y hay múltiples niveles de ironía al ver a los comentaristas «liberales» que vitoreaban un golpe de estado militar sin disfraz, y luego se quejan en voz alta de que la gente está siendo herida o asesinada ahora que su bando está perdiendo. Ayer el MSM no tuvo dificultad en llamar al intento de golpe lo que cualquiera con ojos y oídos podía ver claramente era, un intento de golpe militar.

Hoy, milagrosamente, la línea de los MSM no es un intento de golpe de estado, fue sólo una protesta espontánea y desarmada, y es el malvado gobierno de Venezuela el que trata de presentarla como un golpe de estado. El BBC Breakfast de esta mañana tenía como titular «El presidente Maduro ha acusado a la oposición de montar un intento de golpe de estado»… Sin embargo, no cabe duda de que, de hecho, eso es lo que ocurrió.

El MSM está hoy lleno de vídeos de cañones de agua contra «manifestantes» y de un horrible vídeo de un vehículo militar que embiste a un grupo. Pero todo ha sido cuidadosamente editado para excluir horas de grabaciones de los mismos vehículos militares que fueron lanzados y quemados con cócteles molotov, y a los que se les disparó. Fue una presentación realmente impactante.

En cualquier país civilizado, intentar montar un golpe militar llevaría a la cárcel de por vida, y eso es lo que debería ocurrirle ahora a Juan Guaidó. El intento de Occidente de proteger a su marioneta fingiendo que el fallido golpe militar nunca ocurrió, debe ser resistido, por lo menos en nombre de la honestidad intelectual.

El recurso a la violencia fuerza la elección binaria. He sido y soy un crítico de Maduro en muchos aspectos. Creo que los cambios constitucionales para eludir al Parlamento eran erróneos, y la Asamblea Constituyente elegida indirectamente no es una buena forma de democracia. Venezuela tiene un problema de corrupción desenfrenado. Las sanciones de los Estados Unidos exacerban, pero no son la causa fundamental de la mala gestión económica. Hay deficiencias en materia de derechos humanos. Pero Chávez hizo cambios revolucionarios en la educación y el empoderamiento de los pobres, y es un país mucho mejor gobernado para la masa de su población de lo que sería bajo un régimen títere de la CIA instalado por Estados Unidos. Maduro fue elegido legítimamente. El intento de violencia obliga a una elección binaria.

Sé de qué lado estoy. No es el de Guaidó ni la CIA.


Traducción del inglés de: Antonella Ayala