Algunos miembros del Partido Demócrata sufren del «síndrome mental de Fox News». Con estas palabras, Chris Wallace, uno de los muy conocidos y respetados periodistas de Fox News, comentó sobre el anuncio de los líderes del Partido Demócrata de que no permitirían que la red en la que trabaja albergue uno de sus principales debates. Tom Pérez, presidente del Partido Demócrata, justificó la decisión al declarar que las relaciones demasiado estrechas entre Fox News y Donald Trump no garantizarían una transmisión objetiva para los candidatos democráticos.

Ya era sabido que el 45º presidente tenía y sigue teniendo relaciones muy amistosas con la red de Rupert Murdoch. Pero fue un artículo exhaustivo del New Yorker la gota que derramó el vaso de Pérez que describe cómo Fox News se ha convertido en una fuente de información muy cercana a la televisión estatal para servir a Trump.

Las relaciones del actual inquilino de la Casa Blanca con Fox News han existido durante muchos años. En 2011, Trump participó regularmente en el programa «Fox and Friends»; también como presidente contrató a varios miembros de Fox News como colaboradores de la Casa Blanca. Entre ellos se encuentran John Bolton, actual asesor de seguridad nacional, y Bill Shine, director de comunicación y jefe adjunto de personal de Trump. Sin embargo, Shine entregó su renuncia dado que Trump no estaba satisfecho con su trabajo, pero tendrá un papel aún no bien establecido en la campaña de reelección del 45º presidente.

En la campaña electoral de 2016, los lazos entre Trump y Fox News se habían profundizado. Jane Mayer, la autora del artículo en el New Yorker, deja en claro que en uno de los debates en las primarias republicanas, organizado por Fox News, un ejecutivo le habría dicho a Trump una de las preguntas que le habría hecho la periodista Megyn Kelly. Mayer también cita otro ejemplo de relaciones antiprofesionales con una historia negativa que finalmente salió a la luz el año pasado. Esta es la historia de Stormy Daniels, la estrella porno a quien le pagaron $ 130,000 para guardar silencio sobre su relación con el actual presidente en 2006. Según Mayer, una periodista de Fox News ya había descubierto la historia antes de la elección y estaba lista para transmitirlo pero los ejecutivos de Fox News decidieron mantenerlo oculto.

Con la elección de Trump, las relaciones con Fox News se intensificaron con algunos ejemplos resonantes fuera de cualquier regla periodística. El conductor Sean Hannity, un gran partidario de Trump, incluso hizo campaña, participando en un mitin de Trump en Texas durante las elecciones parciales de noviembre pasado. De hecho, Hannity actuó como miembro de la administración del actual presidente y afirmó que era un honor para él compartir el escenario con el presidente. Un movimiento talmente antiprofesional que incluso algunos colaboradores de Fox News lo han condenado. Hannity, sin embargo, continúa su trabajo y está en contacto frecuente con Trump, actuando de alguna manera como consejero del presidente.

El presidente número 45, que acusa a los medios casi todos los días como noticias falsas y, a veces, como enemigos de la gente, a menudo expresa palabras dulces para Fox News. Sin embargo, incluso con la red de amigos, hay preferencias. Se dice que Trump confió a sus colaboradores que usa una escala del 1 al 10 para identificar la lealtad de los periodistas de Fox News. Hannity recibe un 10 perfecto, pero un poco menos que Steve Doocy, codirector de «Fox and Friends», que Trump adora y que recibe un 12 del presidente.

El periódico Axios nos informó recientemente sobre la jornada del presidente que inicia a partir de las 11:00 de la mañana. En realidad antes de esta hora, Trump generalmente mira «Fox and Friends» y con frecuencia envía tweets que reflejan información obtenida del programa. En otros casos, Fox News usa información de los tweets de Trump para sus programas. Se podría concluir que existe una cierta simbiosis entre el 45º presidente y la red de Murdoch; una mano lava la otra. Fox News apoya al presidente que, por su parte, utiliza la red de Murdoch para hacerse publicidad positiva que a menudo incluye muy poca objetividad periodística. Greg Sargent, columnista del Washington Post, va más allá al afirmar que Fox News no hace más que «propaganda» política.

El periodismo tiene poco que ver con Fox News a pesar del hecho de que algunos profesionales como Wallace, Bret Baier, Shepard Smith y Martha MacCallum trabajan allí. Se recuerda que Murdoch comenzó su red de televisión en 1994 siguiendo el modelo de sus otros periódicos en Inglaterra y Australia para reflejar las necesidades e ideas de un público desinformado pero especialmente para ganar dinero. Funcionó porque Fox superó incluso a CNN en la audiencia a lo largo del tiempo. El público de Fox News formó en gran parte la base de los partidarios de Trump.

La transmisión de debates generalmente recibe excelentes calificaciones que obviamente se traducen en dólares en el banco. Al negar la transmisión de los debates a Fox News, el Partido Demócrata no lo hizo solo por razones prácticas o ideológicas, sino también para evitar poner dólares adicionales en los bolsillos de Murdoch. Eventualmente, este dinero ayudaría a Fox News y, al menos en parte, directa o indirectamente, a beneficiar al individuo actual que los demócratas están haciendo todo lo posible para desalojar de la Casa Blanca.


Traducido del italiano por Michelle Oviedo