El ministro de Asuntos Exteriores ruso precisó que «el carácter fingido de esta escena en el hospital no debe y no puede suscitar dudas a nadie».

El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, comentó este sábado las declaraciones del productor de noticias internacionales de la BBC especializado en Siria, Riam Dalati, sobre la puesta en escena de un ataque químico en la ciudad siria de Duma (Guta Oriental) el 7 de abril de 2018 y afirmó que los países occidentales «desde el principio» entendían que las escenas eran simuladas.

«Occidente entendía perfectamente todo esto desde el principio, porque ciertos países occidentales organizaban estas provocaciones. En particular, la tristemente célebre Cascos Blancos, organización humanitaria, dirigida por un exempleado del [Servicio de Inteligencia Secreto británico] MI6», declaró el ministro ruso y precisó que las naciones que no tomaban parte en la puesta en escena «también entendían el absurdo de dichas acusaciones».

Pero «es alentador que haya periodistas honestos en la Tierra», reiteró Lavrov a continuación. El jefe de la diplomacia rusa citó la publicación de Dalati, en la el periodista había indicado que en la zona no se había usado sarín y aún debe ser confirmado el uso de cloro, haciendo hincapié en que los militares rusos anteriormente habían asegurado que el cloro pudo ser utilizado por los combatientes «como provocación».

Sin embargo, «el carácter fingido de esta escena en el hospital no debe y no puede suscitar dudas a nadie», subrayó Lavrov en el marco de la Conferencia de Seguridad celebrada en Múnich.

«La culminación de este teatro del absurdo»

Dalati, un productor de noticias internacionales de la BBC especializado en Siria, tuiteó este miércoles que puede «demostrar que con toda seguridad la escena en el hospital de Duma fue recreada» para lograr el «máximo efecto», y que «no hubo fallecimientos en el hospital».

Las imágenes de presuntas víctimas civiles del ataque, entre ellas niños, fueron divulgadas por medios occidentales y sirvieron de pretexto para que Occidente responsabilizara a Damasco de la acción sin tener ninguna prueba concluyente. A raíz de esa supuesta agresión, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido lanzaron un ataque múltiple con misiles contra el territorio sirio.

Rusia, aliada del Gobierno sirio en la operación antiterrorista, insistió en la falsedad de las imágenes de las consecuencias del presunto ataque químico. Este jueves el Ministerio de Exteriores ruso exigió a través de su portavoz, María Zajárova, la versión oficial de la BBC sobre lo que describió como «la culminación de este teatro del absurdo».

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