En la conferencia matutina de prensa de este lunes 25 de Febrero, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador fue consultado por una periodista de ADN 40, sobre los acontecimientos acaecidos el pasado sábado en la frontera entre Venezuela y Colombia.

Pregunta: Usted apoyó la entrada de ayuda humanitaria a Venezuela. Sin embargo, este fin de semana se registran varios incidentes en este tenor del traslado de los camiones, incluso se quemaron algunos camiones enteros con ayuda humanitaria.

¿Usted considera que esto abona a llegar a la pacificación en este país antes este conflicto político? Gracias.

Presidente Andrés Manuel López Obrador: Mire, nosotros tenemos muy claro que tiene que buscarse una salida pacífica, negociada, en el caso de Venezuela. Nosotros nos estamos ciñendo a lo que establece la Constitución y lo he repetido muchas veces: no intervención y autodeterminación de los pueblos.

Es un tema que polariza, hay posturas de un lado y de otro. Nosotros nos ajustamos a que se respete la voluntad de los pueblos y que se busque solucionar los problemas de manera pacífica. Solución pacífica -dice nuestra Constitución- de las controversias. No queremos violencia en ninguna parte, nosotros somos partidarios de la no violencia.

Pero no puedo opinar más porque está muy polarizado. Yo lo que considero es que lo mejor es el diálogo, lo mejor es alejar la tentación del uso de la fuerza, que se busque una solución diplomática. Hay muy buenos diplomáticos en el mundo; hay que establecer puentes, construir puentes de entendimiento, no querer imponer las cosas. Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho.

Al mismo tiempo la Secretaría de Relaciones Exteriores emitió un comunicado fijando posición lamentando los acontecimientos violentos y llamando a «las partes involucradas, tanto internas como externas, a rechazar categóricamente el uso de la fuerza y encontrar una salida pacífica a la situación por la que atraviesa ese país sudamericano.»

El texto reafirma al Mecanismo de Montevideo como «una opción de diálogo viable e incluyente, con un plan estratégico concreto, que se mantiene como una alternativa hacia una solución pacífica y que cobra aun mayor pertinencia, a la luz de los acontecimientos más recientes.»

Finalmente, indica que «De existir un acuerdo entre ambas partes para dialogar, México reitera su disposición para apoyar y desplegar un instrumento efectivo de diplomacia diseñado para la resolución de conflictos de forma pacífica.»