«Como tantos y tantos en la Argentina y a nivel internacional, exijo al Estado argentino, representado por el Presidente Mauricio Macri, que conceda la inmediata libertad a la dirigente popular y parlamentaria del Parlasur Milagro Sala, injusta e ilegalmente detenida en la provincia de Jujuy desde comienzos de año.

En tal sentido, uno mi voz a la del Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria de la ONU, a la del Comité contra la Discriminación Racial del mismo organismo, a la de la Organización de Estados Americanos, a la de la CIDH y a la de tantos dirigentes, funcionarios, legisladores, organismos y demócratas que están reclamando a lo largo del mundo la inmediata libertad a MIlagro para que, como mujer libre que es, pueda enfrentar las acusaciones que desde el mismo Estado le están haciendo.

Y en un día tan especial como es el Día Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer, denuncio la injusta reclusión a la que el Estado argentino está sometiendo a Milagro y a Gladys Díaz, Mirta Aizama, Mirta Guerrero y Graciela López. Todas ellas, las cinco, son el mejor símbolo de la mujer que no acepta la postergación, la injusticia, la sumisión y la pobreza a la que la condenan los dueños del poder y se rebela contra ello organizando a sus iguales para salir de esa situación.

La desvergüenza y el cinismo con que el gobierno argentino ha respondido a la exigencia de las Naciones Unidas no deben ser confundidos con impunidad: es la presión internacional junto a la resistencia y la lucha del pueblo argentino lo que lo ha obligado a liberar ya a 6 de los dirigentes populares presos, y este clamor es el único camino para lograr la libertad de Milagro y las demás compañeras presas.»

Giovanna Martelli
Diputada italiana
Roma, 25 de noviembre de 2016