El gobierno español de Rajoy en su afán por controlar todo, aprovechando su mayoría y en su línea de recortes a la libertad de expresión, ha dado una vuelta de tuerca, quitando y poniendo en cargos directivos de los medios de comunicación públicos a ‘afines’ a sus intereses. En estas circunstancias, nos llega este comunicado que reproducimos literalmente.

El Círculo de Podemos Periodismo y Medios de Comunicación apoya las protestas de los trabajadores de Radiotelevisión Española (RTVE) en contra de la manipulación informativa y del uso partidista e ilegítimo de un servicio público.

El pasado viernes 28 de noviembre, el recién nombrado director de Informativos, José Antonio Álvarez Gundín, cesó a varios jefes y adjuntos de diversas áreas de la redacción de Informativos. A continuación, tras conocer que habían sido destituidos sus adjuntos con más experiencia, la jefa de Economía dimitió voluntariamente. Poco antes habían sido destituidos también el director de medios interactivos y el presentador del Telediario de fin de semana. En respuesta, los trabajadores de TVE decidieron realizar una sentada como acto de protesta frente al despacho de Gundín, ex responsable de opinión del diario La Razón, cuyo nombramiento ya había sido rechazado en referéndum por el 77% de la plantilla.

Estos ceses han afectado a periodistas “con una acreditada e indiscutible trayectoria profesional”, según el Consejo de Informativos, y no se pueden justificar de ningún modo por motivos profesionales. La dirección alega como única explicación que tiene “derecho a formar un equipo de confianza”; sin embargo, el Consejo de Informativos ha expresado su temor a una maniobra para “imponer un control aún mayor sobre la información.”

Podemos Periodismo y Medios de Comunicación considera que el gobierno del Partido Popular está empleando a nivel estatal la receta aplicada para las televisiones públicas valenciana o madrileña: degenerar un servicio público emitiendo información manipulada y gestionando con total opacidad, sin importarle la pérdida de credibilidad y audiencia ni las consiguientes reducciones masivas de plantilla. Esto explica el nombramiento como presidente del ente público de José Antonio Sánchez, imputado por prevaricación, tráfico de influencias y malversación de fondos públicos a raíz de una denuncia interpuesta por ex trabajadores de Telemadrid. El episodio del viernes pasado es solo un paso más en el largo proceso de destrucción del servicio público.

Desde Podemos abogamos por una RTVE plural, participativa y no partidista. La radio, la televisión y la web públicas deben satisfacer el derecho de los ciudadanos y ciudadanas a una información independiente y veraz; un derecho, además, esencial para el ejercicio de la democracia.

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