comisario del gobierno ante el Tribunal de Primera Instancia de la ciudad de Petit-Goâve (sur). Las autoridades confiscaron el transmisor y otros equipos de la radio.

De forma contraria a la tendencia general en el continente, la legislación haitiana aún prevé penas de prisión en caso de difamación. Asimismo, la encarcelación por un delito de prensa va contra los estándares internacionales en materia de libertad de prensa y de la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Más allá de los procesos judiciales por “difamación”, la detención arbitraria de estos dos periodistas muestra un abuso de poder que constituye otra forma de censura. Reporteros sin Fronteras pide que sean puestos en libertad de forma inmediata e incondicional y exige a las autoridades que lleven a cabo una investigación imparcial y que restituyan el equipo confiscado.

Según el Secretario General de la Asociación de Medios de Comunicación de la región de Las Palmas, Guyteau Mathieu, los conductores fueron citados en el juzgado de Petit-Goâve, el 22 de junio de 2011, tras una petición firmada por funcionarios, entre ellos el alcalde de la ciudad, Justal Ronald, y miembros de la sociedad civil, para responder a preguntas relativas a información y opiniones difundidas durante sus emisiones. Dos grupos de simpatizantes, uno a favor de los periodistas y otro del alcalde, los acompañaron al tribunal.

Los enfrentamientos estallaron. Lanzaron piedras contra las instalaciones del juzgado. Varias personas resultaron heridas. Fue entonces cuando el comisario del gobierno ordenó la detención de Ernst Joseph y Wolf ‘Duralph’ François, quienes se encontraban entonces en su oficina. Según el secretario general de SOS Journalistes, Joseph Guyler C. Delva, se habría considerado a los periodistas responsables de los actos cometidos por algunos de sus simpatizantes.

El mismo día, un juez de paz colocó sellos en las instalaciones de la estación y confiscó el material, llevándoselo en un vehículo de la policía. Después, los dos periodistas fueron trasladados a la comisaría de policía de Carrefour, zona metropolitana de Puerto Príncipe.

Otros tres periodistas, Eddy Jackson Alexis, Josias Pierre y Jacques Innocent, suspendidos de la Televisión Nacional de Haití en abril pasado, son acusados de “difamación” por el director general de la cadena, Pradel Henriquez (http://es.rsf.org/haiti-tres-periodistas-de-la-television-12-04-2011,40007.html).