Convergencia de las Culturas pide una acción urgente por parte del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, el Alto Comisionado para los Refugiados, el Consejo de Europa y las organizaciones internacionales de Derechos Humanos sobre la situación de unos 350 refugiados, que huyeron del Cuerno de África por las crisis humanitarias y que se encuentran detenidos desde el 30 de junio en el centro de internamiento Braq, a 80 km de Sebah, en el sur de Libia.

El mismo 30 de junio, la Agencia Habeshia y el Grupo EveryOne comunicó por teléfono con algunos de los detenidos, lanzando una alarma internacional: «Hemos recibido un llamamiento urgente de 350 refugiados detenidos en Libia y trasladados de la prisión Mishratah a la de Al Braq. Hay alrededor de 80 niños entre ellos. Han sufrido graves actos de violencia: palizas, tratos inhumanos y degradantes y torturas. Los refugiados amenazan suicidarse por ingestión de sustancias tóxicas”.

Dos días más tarde, se lanza una nueva advertencia: “algunos de los refugiados nos dicen que están en riesgo de ser deportados a sus países de origen, que su vida se encuentra en riesgo extremo”.

El Grupo EveryOne ha añadido en su mensaje a las instituciones de la UE y la ONU, que «muchos de los refugiados torturados en riesgo de deportación inmediata a los países en crisis humanitarias, incluyendo Sudán y Eritrea, proceden de rechazos de Italia y Malta”

Convergencia de las Culturas se une al Grupo EveryOne para pedir una acción rápida para prevenir la peor tragedia humanitaria en las próximas horas y detener finalmente, con una medida provisional, los rechazos de Italia y Malta, fruto de políticas xenófobas y de un injusto acuerdo con Libia, que viola la Convención de Ginebra en su totalidad.