Raúl Zaffaroni, ex-ministro de la Corte Suprema argentina y juez de la Interamericana de Derechos Humanos, marca arbitrariedades en la operación Lava Jato y en los tribunales.

por Thales Schmidt

Raúl Zaffaroni es abogado y uno de los mayores especialistas en derecho penal del mundo. Fue durante más de 10 años ministro de la Corte Suprema argentina y hoy es juez en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Este martes (10) el secretario general de la OEA (Organización de Estados Americanos) Luis Almagro, después de reunirse con Dilma y Lewandowski (STF) (Supremo Tribunal Federal), anunció la intención de consultar a la Corte Interamericana sobre la legalidad del proceso de impeachment (juicio político), para encontrar respuestas jurídicas más contundentes ya que las que obtuvo hasta el momento fueron consideradas insuficientes.

El perfil de Zaffaroni en la Revista Anfibia cuenta que, cuando fue invitado en 2003 por el entonces presidente Néstor Kirchner para la Corte, él le preguntó incrédulo: ¿pero usted me conoce? Tiene 32 doctorados honoris causa de diversas universidades alrededor del mundo, varios libros publicados en portugués y es una referencia para los abogados brasileros. El magistrado no duda en dar sus opiniones, que son muchas.

En entrevista exclusiva para Calle2 por email, el juez afirma que el Poder Judicial brasilero es burocrático y selectivo contra el Partido de los Trabajadores (PT) y que la comparación entre la operación Lava Jato y la operación Manos Limpias –responsable por investigar casos de corrupción en Italia en los años 90 y fuente de inspiración de Sérgio Moro– es incorrecta. “La operación italiana Manos Limpias fue contra todos los sectores de la política italiana; la operación Lava Jato es contra un solo sector.” Para él, vivimos un “golpe de estado institucional de nuevo estilo”.

La decisión de Moro de hacer escuchas telefónicas y divulgar conversaciones entre el ex presidente Lula y su abogado, también fue motivo de críticas por parte del juez: “La comunicación con el abogado no puede ser interceptada por nadie, mucho menos ser usada como prueba. ¿Qué garantías vamos a tener si no se puede hablar con sigilo ni siquiera con el propio abogado?”. Zaffaroni también dice que la operación Lava Jato abusa de la prisión preventiva y critica el uso de la delación premiada¹.

También analiza que el gobierno de Mauricio Macri enfrentará “serios problemas” y afirma que el político del PRO gobierna por decretos-ley, “como los militares”. Estos meses crearon una transferencia de riqueza muy preocupante”, dice Zaffaroni.

Hay una gran discusión en Brasil: si las llamadas pedaladas fiscales² del gobierno de Dilma Rousseff son un crimen de responsabilidad y suficientes para alejar a la presidente. ¿En su lectura hubo crimen de responsabilidad?

No, no hubo crimen de responsabilidad porque otros presidentes hicieron lo mismo y el Tribunal de Cuentas no dijo que fuera error. El Tribunal de Cuentas puede cambiar su criterio, pero si lo hace debe al menos dejar al margen la responsabilidad de la presidente, porque su misma conducta anterior la habría hecho incurrir en errores.

¿Brasil asiste a un proceso de juicio político que respeta todos los requisitos legales o se trata de un golpe disfrazado?

Es un golpe de Estado institucional de nuevo estilo, como corresponde a la modalidad de colonialismo tardío que estamos viviendo en la región. Ya no nos ocupan con las fuerzas armadas ni con las oligarquías locales, sino a través de los defectos institucionales de nuestras democracias. Fundamentalmente, dos de ellos: el monopolio de los medios de comunicación y la estructura burocrática y selectiva del Poder Judicial.

Foto Aníbal Greco, Agencia Paco Urondo

Foto Aníbal Greco, Agencia Paco Urondo

¿De qué manera el Poder Judicial brasileiro es selectivo?

Veo que el Poder Judicial brasilero es selectivo contra el PT.

¿Qué opina del probable próximo presidente del Brasil, Michel Temer, del PMDB (Partido de Movimiento Democrático Brasilero)?

No se, pero temo que el Brasil entre en un período de difícil gobernabilidad. Espero que eso no suceda por el bien de todos, inclusive nuestro. Brasil es, por su dimensión, población y economía, la pieza clave de nuestra regionalización y si una ingobernabilidad debilita o desactiva la regionalización, todos los sudamericanos están perdidos en el mundo actual, donde sin la regionalización los intereses del capital financiero transnacional nos pasarán por encima.

Muchos juristas critican la operación Lava Jato³ diciendo que hay un abuso de la prisión preventiva como forma de forzar delaciones premiadas. En su opinión ¿se están respetando todas las garantías constitucionales de los acusados?

Sin duda que el uso arbitrario de la prisión preventiva es una extorsión. La prisión preventiva es la cuadratura del círculo del proceso penal más aún cuando se la manipula arbitrariamente, al margen de razones legales y jurisprudencias que la limitan. Es obvio que hay una extorsión cuando se dice “si hablas te suelto, si no te dejo preso”. Eso es lo mismo que cuando la Inquisición torturaba a las mujeres para que dijeran el nombre de otra posible “bruja”, hasta que la mujer nombraba a cualquiera: es una forma de asegurar la clientela.

El juez Sérgio Moro, responsable por la operación Lava Jato, escribió en un artículo en 2004 sobre la operación Manos Limpias, que la colaboración con los medios es indispensable para combatir la corrupción. De ese modo, prácticamente todas las informaciones relativas a la operación Lava Jato son volcadas a la prensa. ¿Qué evaluación hace usted de esa práctica?

La operación italiana Manos Limpias fue contra todos los sectores de la política italiana, la Lava Jato es contra un solo sector. Esto no tiene nada que ver con la operación Manos Limpias, es directamente una posición judicial partidaria, algo totalmente diferente.

Una de las acciones más polémicas de Moro fue la divulgación de escuchas telefónicas de Lula conversando con su abogado e inclusive con Dilma Rousseff. ¿Moro no fue demasiado lejos al divulgar esas escuchas?

La comunicación con el abogado no puede ser interceptada por nadie, mucho menos ser usada como prueba. ¿Qué garantías vamos a tener si no se puede hablar con sigilo ni siquiera con el propio abogado? ¿Cómo se pueden intervenir comunicaciones privadas porque un juez quiere y luego publicitarlas? ¿Qué es eso? ¿Stalinismo? ¿El Gran Hermano controla todo? ¿Estamos en una democracia y en una república o en un estado totalitario?

Foto Agencia Paco Urondo

Foto Agencia Paco Urondo

¿Cuál es el papel de la prensa en la actual crisis política brasilera?

Fundamental, básico. Los monopolios mediáticos latinoamericanos, por su volumen, son parte de corporaciones transnacionales y por tanto de los intereses del capital financiero internacional. Mientras sigamos teniendo monopolios mediáticos que ningún país desarrollado tolera, no tendremos democracia, ellos inventan la realidad, la crean. Ahora no es Hitler ni Mussolini o Stalin los que controlan los medios de comunicación y hacen censuran, son las corporaciones transnacionales y sus intereses mezquinos.

En entrevistas anteriores usted hizo duras críticas al uso de la delación premiada. ¿No es un importante recurso en los delitos de cuello blanco?

La delación premiada es como la tortura: da lugar a quien, para resolver su situación, dice cualquier cosa. ¿Qué valor tiene lo que dice una persona que sufre extorsión? Si eso es prueba de culpa, realmente volvemos a la Edad Media, se acabó el estado de derecho, naufragaron todas las garantías. No hay delito de cuello blanco que no se pueda investigar con papeles; la marca queda, el dinero sucio tiene rutas que se pueden investigar sin mayores dificultades, no es necesario recurrir a la delación. Eso es como fingir que no se puede investigar y castigar sin tortura.

¿Qué evaluación hace de los primeros meses de gobierno de Mauricio Macri? ¿Qué podemos esperar?

Creo que esos meses crearon una transferencia de riqueza muy preocupante. La disminución de impuestos al agronegocio y sobre todo a la minería, los despidos masivos en la administración pública, la desarticulación de la investigación y la tecnología en Bariloche, la reducción de los presupuestos universitarios, la inflación y pérdida del poder adquisitivo de los salarios, además del caos institucional, la manipulación del Congreso, una Corte Suprema de Justicia reducida a tres ministros, todo eso anuncia un panorama de dificultades muy preocupante. Además de la pretensión de cerrar todo espacio de crítica al perseguir a periodistas opositores, el discurso que atribuye todos los males al gobierno anterior, la acusación judicial contra Cristina Kirchner, la prisión de Milagro Sala. En fin, creo que vamos a tener serios problemas.

¿Macri está abusando de los DNU (Decretos de Necesidad y Urgencia) como los utilizados para alterar la Ley de Servicios y Comunicación Audiovisual?

Sí. Macri hace lo que quiere. No se trata de abusar sino de gobernar por decretos-ley, como los gobiernos militares: un decreto de necesidad y urgencia sin urgencia, es un simple decreto-ley.

¿Cuál es su lectura sobre la prisión de Milagro Sala (dirigente política y social argentina, líder de la organización barrial Tupac Amaru, presa a comienzos del año acusada de causar tumulto)?

Es una venganza personal del gobernador de la provincia de Jujuy (Gerardo Morales, aliado de Macri) y también una arbitrariedad. Si Milagro usó recursos de manera desordenada, es un delito execrable. El resto son invenciones de una justicia provincial manipulada descaradamente por el gobierno de Jujuy, que parece un feudo. En una sesión nocturna del Poder Legislativo se amplió la Corte Suprema de la provincia y, al día siguiente, dos de los diputados que votaron por la ampliación fueron nombrados jueces de ese tribunal. Más claro y descarado, imposible. Milagro es diputada del Parlasur (Parlamento del Mercosur) y tiene derecho a foros por lo menos para el traslado para integrarse, pero no son reconocidos precisamente porque está presa.

Notas
1 En la justicia brasilera, denuncia o acusación que hace una persona (acusada o condenada) a cambio de un beneficio (por ejemplo, reducción de pena).
2 Designación popular de operaciones del Tesoro Nacional no previstas en la legislación, destinadas a aliviar la situación fiscal del gobierno y presentar indicadores económicos convenientes.
3 Investigación de lavado de activos que involucra a la Petrobras (compañía brasilera de petróleo), empresarios y políticos.

El artículo original se puede leer aquí