La organización judía internacional J-Link nos hace llegar este comunicado o llamamiento. La organización se define como: «»una red internacional de organizaciones judías progresistas. Compartimos el amor por Israel y el compromiso con la Democracia, los Derechos Humanos, el pluralismo religioso y una resolución pacífica del conflicto israelí-palestino. Creemos en los valores consagrados en la Declaración de Independencia de Israel, que prometen “completa igualdad de derechos sociales». »

Valoramos enormemente los esfuerzos de aquellas voces y comunidades Judías que, a nivel global, trabajan para hacerse oír y ayudar a diferenciar entre el antisemitismo y la crítica política a Israel. Es fundamental entender que Israel es un Estado con derechos y obligaciones, como el resto de las naciones representadas en la UNO, que ejecuta políticas concretas; y como Estado, es responsable de los actos de su Gobierno, su ejército y sus instituciones. Toda acción que clarifique esta distinción, permitiendo distinguir una condena clara del antisemitismo (cuando sea el caso) de una crítica legítima a un Estado en sus actos, es aclaradora y punto de partida.

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LA ANEXIÓN PONE EN PELIGRO LA SEGURIDAD Y LA DEMOCRACIA DE ISRAEL Y APLASTA
LAS ESPERANZAS PALESTINAS DE UN FUTURO JUSTO

 

LLAMAMIENTO DE LOS PARTIDARIOS DE J-LINK
11 de septiembre de 2025

En mayo de 2020, J-Link, con un apoyo significativo de organizaciones judías en 17 países, pidió a Israel que evitara la anexión de los territorios palestinos ocupados. En aquel momento, aplaudimos el aparente retroceso de la anexión y apoyamos la cooperación regional de Israel como socio en los Acuerdos de Abraham.

Lamentablemente, la anexión de facto ha continuado. Además, los esfuerzos internacionales para lograr un alto el fuego en Gaza se ven frustrados tanto por Israel como por Hamás. El gobierno israelí, presionado por partidos de extrema derecha, vuelve a amenazar con anexar grandes partes de Cisjordania y Gaza. La anexión es ilegal según el derecho internacional y contraviene las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU relativas al conflicto israelí-palestino, en particular la Resolución 2334 del 16 de diciembre de 2016.

Si se lleva a cabo, la anexión supondrá el fin de la solución de dos Estados y hará añicos cualquier esperanza del pueblo palestino de alcanzar la autodeterminación por medios no violentos.

La anexión convertirá a Israel en un Estado que mantendrá un control permanente sobre millones de palestinos que viven dentro de su territorio, negándoles derechos civiles y políticos básicos, poniendo así fin a la democracia.

Y la anexión aislará aún más a Israel a nivel internacional; y, como señaló recientemente Emiratos Árabes Unidos, trazará “una línea roja que pondría fin a la integración regional”.

De hecho, la anexión destruirá precisamente la seguridad que Israel ha buscado durante décadas. Además, provocará una creciente ola de deslegitimación y antisemitismo.

Finalmente, la anexión pondrá en riesgo las relaciones entre Israel y los judíos de todo el mundo para quienes los derechos humanos, la igualdad y la democracia son principios esenciales.

J-Link insta al gobierno del Estado de Israel a abandonar todos los esfuerzos de anexión.

Respetuosamente,
El Comité de Coordinación de J-Link

Jon Allen (exembajador canadiense en Israel y España), Ken Bob (New Jewish Narrative, EE. UU.), Basil Dubb (JDI, Sudáfrica), Giorgio Gomel (JCall Europe, Italia), Barbara Landau (Canadá), Alon Liel (PWG, Israel), Sebastian Levi (Francia) y Shlomo Slutzky (J Amlat, Argentina).

Contacto e información: www.jlinknetwork.org

El artículo original se puede leer aquí