La llegada masiva de migrantes a las Islas Canarias (España), desde el Continente africano, ha generado una situación de sobre-población en los centros habilitados por el Gobierno (CETI), que ha provocado que se levanten campamentos de carpas alrededor.  Las pésimas condiciones en las que viven desde hace meses ha hecho que la situación explotara en el campamento de Las Raíces. Y la respuesta gubernamental ha sido la represión en lugar del acercamiento y el diálogo.

Organizaciones como la Asamblea de Apoyo a Migrantes de Tenerife está llamando la atención sobre la criminalización y vulneración de derechos que están sufriendo continuamente los «hermanos migrantes».

Los incidentes que tuvieron lugar el pasado 13 de marzo en el campamento para migrantes de Las Raíces, en Tenerife, fue tema de apertura de telediarios. En redes sociales se difundió el mensaje viral de que “seis vigilantes de seguridad fueron heridos con ácido y cal viva”, extremo comprobado que es mentira y ha sido desmentido por las propias autoridades canarias.

La propia Subdelegación del Gobierno señalan que el incidente se produjo en la fila del  turno de comedor, por las largas colas que tienen que hacer para poder comer a diario. Por otra parte, las estadísticas niegan la existencia de un aumento de la inseguridad en Canarias por la llegada de migrantes sin papeles.

Hubo en el desarrollo de la reyerta varios heridos entre los vigilantes y los migrantes acogidos, pero es rotundamente mentira que se produjera un ataque con “ácido y cal viva”, como se difundió en los mensajes virales. Tampoco Accem (la organización no gubernamental que gestiona el campamento), ni los responsables de la Policía Local, tienen constancia de que hubiera agresiones y heridos con dichos materiales.

La intervención de la Policía Nacional en el campamento se ha saldado con la detención de ocho migrantes, según informaron a Efe fuentes la Delegación del Gobierno en Canarias.

Las condiciones que soportan las personas migrantes en Canarias son cada vez más brutales tras meses de bloqueo, frío y lluvia, hambre o falta de alimentos; viven en unas condiciones inhumanas. Al mismo tiempo, mediática y políticamente se deshumaniza a las miles de personas y se tergiversan las realidades para criminalizarlas y culpabilizarlas de lo que ocurre.

Desde la Asamblea de Apoyo a Migrantes de Tenerife se ha denunciado en las redes sociales la «respuesta represiva» del Gobierno en forma de «intervenciones policiales ante lo que debería ser mediación y diálogo», y han hecho «una llamada de auxilio a toda la comunidad antirracista para no normalizar ni olvidar lo que allí está ocurriendo con nuestros hermanos migrantes, cuyos derechos y dignidad están siendo vulnerados y humillados cada día. La única solución que dan las instituciones es enviar decenas de policías todas las noches. Llevamos dos meses denunciando que la situación es insostenible, y las denuncias se apilan mientras miran a otro lado. Exigimos menos represión y presencia policial y más asistencia médica y psicológica para las personas migrantes. Pero ante todo, LIBERTAD de tránsito de una vez por todas».

Para exigir esa libertad de movimiento, se está haciendo una convocatoria que tendrá lugar este próximo 10 de abril, a las 12 de la mañana, ante la sede del PSOE en La Laguna (Tenerife)

“Las Raíces” es uno de los CETIs (Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes) que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha habilitado y está ubicado en La Laguna (Tenerife). Dichos CETIs son, en realidad, centros de detención de migrantes, cuyo cierre piden organizaciones de todo el Estado español desde hace años.