¡Chile despertó! es la consigna que han coreado millones de manifestantes durante estos últimos trece días a lo largo y ancho de Chile. ¿Y cual es la respuesta que ha recibido ese clamor? Solo la represión de un gobierno insensible que, saltándose la legalidad vigente, ha cometido las mayores violaciones a los Derechos Humanos sucedidas en todo este periodo posterior a la dictadura. El «nunca más», que creímos incorporado después de la experiencia dictatorial de 17 años, se ha roto, lesionando nuevamente el alma de Chile.

Quienes han producido tal situación tienen que asumir la responsabilidad política de lo sucedido, pero no tienen la altura moral ni la coherencia para eso. Tal conducta obliga a utilizar todos los mecanismos legales existentes para denunciar y aclarar responsabilidades y por ello los humanistas impulsamos y compartimos con otras fuerzas políticas en el parlamento una acusación constitucional contra el Presidente Sebastián Piñera, principal responsable y su ex ministro del interior, Andrés Chadwick.

En este contexto y mientras no se aclaren debidamente los hechos, no creemos que haya condiciones para dialogar con este gobierno, sea quien sea quien lo represente. Por ello los Humanistas hemos decidido no aceptar la invitación a participar en una reunión en el Ministerio del Interior, efectuada por su actual titular Gonzalo Blumel.

Por otra parte, creemos que la demanda que surge de este despertar de Chile es clara: la necesidad de un nuevo pacto social, con verdadera participación ciudadana, que generando los espacios de diálogo lo suficientemente amplios, culmine en la elección de una Asamblea Constituyente que redacte una nueva Constitución y que pueda proponer al pueblo como marco legal para construir el Chile que añoramos para este siglo XXI.

Equipo de Coordinación Nacional
Partido Humanista