Por Leandro Sena Lara

Warmis, el equipo de base de Convergencia de las culturas, realizó una charla el pasado viernes 8 en el VII Foro Social Mundial de Migraciones, para debatir con los participantes la violencia obstétrica contra mujeres inmigrantes, principalmente en el Sistema Único de Salud (SUS).

El diálogo se desarrolló en torno a la defensa del SUS, al preconcepto étnico  y al respeto por las tradiciones de las mujeres inmigrantes, que en algunos casos son ignoradas por los profesionales de la salud a la hora del parto.

Según la doctora Cláudia Medeiros –profesora del curso de obstetricia de la Escuela de Artes, Ciencias y Humanidades de la Universidad de San Pablo (USP), “es necesario defender al SUS. Defender el SUS es garantizar que los inmigrantes tengan acceso a él”. Andrea Carabantes, integrante de Warmis, dijo que “el sistema público de salud es la puerta de entrada para la mayoría de los inmigrantes del país”.

El acceso gratuito a la salud es un derecho universal en el Brasil, garantizado por la Constitución. En 1996, la ley 9263 garantizó también la planificación reproductiva, que ofrece a las mujeres píldora anticonceptiva oral, mini píldora (para mujeres que están amamantando) y anticonceptivos, entre otros.

Por falta de conocimiento y divulgación “las dos píldoras más utilizadas por las mujeres son compradas (en farmacias) aunque las mujeres pueden retirarlas en el SUS”, afirma Cláudia Medeiros.

Violencia obstétrica

Debatir la violencia obstétrica contra inmigrantes en el Brasil es fundamental ya que sólo el Hospital Maternidad Leonor Mendes de Barros, localizado en la Zona Este de São Paulo, realiza el parto a cerca de 100 inmigrantes por semana.

Las violencias cometidas son diversas según la profesora: “Las mujeres bolivianas tienen la costumbre de parir de pie o en cuclillas. Hay un relato de una mujer boliviana forzada a acostarse en la mesa de parto”. Andrea complementa: “Hay muchas mujeres que prefieren volver a Bolivia para tener a su hijo”.

Los participantes también relataron problemas de comunicación con los inmigrantes cuyos países de origen son casi siempre ignorados por los profesionales de la salud, impidiendo una atención más humanizada y respetuosa.

Propuestas contra la violencia

El encuentro derivó en algunas propuestas prácticas, entre ellas la inclusión de políticas públicas para mujeres inmigrantes en el documento final del Foro Social Mundial de Migraciones.

La amplia divulgación de los derechos de salud para inmigrantes mujeres, la denuncia de la xenofobia y el fortalecimiento de colectivos y movimientos sociales también fueron presentados como alternativas para humanizar la atención de salud de las inmigrantes, frente a la violencia sufrida diariamente.