Nací en un territorio diaguita, en la ensenada de Tequirque sobre el cerro de Kokimpu en el año 1964, he vivido en Coquimbo toda  mi vida y soy creador de algunos instrumentos musicales con influencias Sur-Andinas en madera de Agave, con diseños e iconografías originarias de nuestra cultura, lo que se refleja en  mi libro: «El Ágave está cantando con la estética y la sonoridad Diaguita en tierras de Coquimbo».

Mi vida ha sido hermosa pero, de pequeño la marginalidad marco el sello de mis necesidades sociales, no así mi interés por el deporte, la música y los estudios, cosa que a lo largo del tiempo, todas ellas, dan como resultado una situación poca equitativa y desprovistas de igualdad de condiciones en esta sociedad.

A pesar de aquello, mi familia me incentivo una idea especial, mi madre Mirna, con oficio de costurera y mi padre José, que era un carpintero, me enseñaron a luchar pese a toda adversidad y levantarme desde cualquier situación de crisis fortalecido y con nuevos aprendizajes. Siento la necesidad de reivindicar el legado ancestral de mi linaje Diaguita, transmitido por vía de mi abuela materna, Albertina Araya, quien me enseñó a ver la vida a través de los ojos indigenistas ancestrales.

Como artista multidisciplinario en estos tiempos, he logrado canalizar mis frustraciones y fracasos a través del trabajo creativo en diversas áreas de la cultura. Cambiar mi perspectiva hacia una mentalidad de abundancia ha sido clave para alcanzar mis metas y ahora busco posicionar para el conjunto un reconocimiento y valoración del camino recorrido como diaguitas y junto a otros potenciar una mirada ancestral valedera. Me autodeclaro artista integral, porque creo en la necesidad de dominar diferentes ámbitos culturales y explorar nuevas perspectivas para enriquecer al mundo con mi propuesta artística que entrega una visión de futuro-presente. Hoy mi objetivo principal, junto a otros hermanos y hermanas diaguitas, es recuperar el rico legado artístico dejado por nuestros ancestros Diaguitas y revalorar cada línea geométrica, forma, estética y sonido que conforma el códice artístico territorial de mi cultura.

           Algunos obstáculos

Sin embargo, en la vida moderna, la equidad nacional se ha visto mermada, afectando no solo mi sabiduría propia, sino también la educativa, social y cultural de un grupo social y étnico como el nuestro.

Lamentablemente, los Diaguitas chilenos estamos siendo invisibilizados por la república, siendo reconocidos como pueblo originario sin territorio ni lengua. Esto pone de manifiesto la ignorancia de las autoridades gubernamentales sobre nuestra ancestralidad territorial de más de 1800 años y nuestro legado artístico reconocido en el arte precolombino de América del Sur por la gran mayoría estudiosa y culta de la sociedad.

A lo largo de la historia, hemos sido sometidos por los Incas, los conquistadores europeos y por algunos mestizos chilenos, y en la actualidad, nos vemos aculturizados incluso por nuestros propios hermanos mapuches. Es urgente fortalecer nuestras tradiciones y costumbres, pero nos encontramos con obstáculos en el camino. Las instituciones encargadas de tramitar y apoyar nuestras iniciativas nos postergan y nos ningunean, impidiéndonos ejercer nuestras voces por el momento, es hora de alzar nuestras demandas, visiones y la realidad en común que vivimos.

Es fundamental que se tome conciencia y se abra espacio para nuestro pueblo originario Diaguita. En este tiempo moderno, el valle de Elqui y su gente originaria son depositarios de una energía planetaria única que está abierta al espíritu y a lo mejor del ser humano. El respeto y el amor son los pilares de nuestra convivencia y bienestar, aportamos conocimientos únicos y formas de comprender el mundo de manera diferente.

Es hora de poner fin a la aculturación que se puede entender como un proceso de desaparición y trabajar juntos para construir una sociedad más justa y equitativa, converger y entenderlos como hermanos y hermanas hacia un futuro en común. Nuestro legado ancestral merece ser reconocido y valorado, y nuestra cultura Diaguita debe ocupar un lugar destacado en el panorama cultural y social del mundo.

Nota: Audio exclusivamente para personas con discapacidad visual

Kokimpu, Abya Yala, Télkara 2023.

  Felipe Yuri Retamal Albiña. AJOYAK DIAGUITA

  Miembro de Convergencia de las Culturas -Chile