Más de 30.000 nacionales centroafricanos han huido hacia Camerún, República Democrática del Congo, Cha y República del Congo, tras las elecciones del 27 de diciembre pasado, que desataron una nueva ola de violencia en el país.

El portavoz en Ginebra de ACNUR, Boris Cheshirkov, portavoz de ACNUR en Ginebra informó que, además, miles de centroafricanos se desplazaron desde sus territorios a otros lugares del país ya desde mediados del mes de diciembre. La cifra de personas desplazadas asciende a 185.000. ¿La razón? Ya previeron que la violencia escalaría conforme se acercara la fecha de las votaciones.

Desde el Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados, se expresó gran preocupación por la graves y permanentes violaciones a los derechos humanos y llamó a los países fronterizos a dar asilo apoyando, además, el registro de quienes llegan.

Finalmente, ACNUR agregó que las condiciones de los albergues temporales o las comunidades a las que llegan quienes huyen no cumplen con condiciones básicas de agua, saneamiento, alimentación, etc, lo que cual incide en la elevación del número de contagios por COVID-19 y en la propagación de otras enfermedades.