A más tardar en el mes de enero, las autoridades sanitarias chilenas intentan aprobar la vacuna contra el coronavirus producida por la empresa china Sinovac, según informó Heriberto García, Director del Instituto de Salud Pública (ISP).

Esta sería la segunda vacuna aprobada en Chile para ser utilizada en el país, después que el mismo Instituto autorizara aquella producida por el laboratorio norteamericano Pfizer, que anuncia su arribo para mañana a Santiago.

Las autoridades han firmado convenios con ambas entidades para tener opciones al importar vacunas, las que permitirían poder contar con un total de dosis -entre ambos compuestos- para llegar a inmunizar a 10 millones de chilenos contra el Covid-19.

Dos funcionarias del ISP regresaron esta mañana de China, según informó García, donde se encontraban supervisando las plantas de producción de Sinovac, las que les parecieron de absoluta confianza, de modo que se procederá a expedir un certificado que permita solicitar la importación de estas vacunas «porque hay que ser muy rápido con este tema, no podemos esperar, ni un día más se puede perder», dijo.

La misma vacuna china Sinovac, se encuentra a un paso de ser aprobada en Brasil, lo que permitiría la importación de 46 millones de dosis -pese a toda la polémica desatada al respecto por el Presidente Bolsonaro- por parte del Gobierno de Sao Paulo.