El Senado argentino aprobó una medida conocida como el “impuesto a los millonarios” que consiste en un impuesto único que deberán pagar alrededor de 12.000 de los ciudadanos más ricos del país, que recaudará 3,7 mil millones de dólares para ayudar al Gobierno a responder a la crisis del coronavirus y a fortalecer la economía del país.