La Campaña Argentina por el Derecho a la Educación (CADE), expresa su preocupación por las presiones que, ciertos sectores, utilizando el poder de los medios masivos de comunicación, están generando sobre el Sistema Educativo para que se vuelva a recibir a les estudiantes en los edificios escolares en momentos en que la pandemia que estamos sufriendo está en su etapa más crítica y los casos de contagio continúan aumentando.

Resulta al menos irracional que estemos pensando en abrir las aulas físicas en las próximas semanas cuando estamos confirmando más de 8.000 casos de contagios diarios de COVID 19 y habiéndolas cerrado cuando solo teníamos 88 casos diarios.

Así como nuestro capítulo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se ha manifestado claramente acompañando a la Multisectorial por la Educación Pública en el rechazo de las versiones referidas a un posible retorno de les estudiantes a los edificios escolares en dicho distrito, consideramos que se requiere ser muy claros en lo que se refiere al conjunto de nuestro territorio nacional, en este momento crítico de la pandemia por el que estamos atravesando.

Por otra parte, en esta nueva etapa que transcurre a nivel mundial, todos los reportes internacionales señalan una preocupante baja del promedio de edad de las personas que se están contagiando.

Creemos urgente trabajar en el fortalecimiento y la creación de nuevos y contextualizados formatos escolares de les estudiantes que están aprendiendo desde sus hogares, con mayores o menores recursos virtuales a disposición.

Dichos formatos tienen que irse mejorando -evitando medidas compensatorias que agudizan asimetrías y nada tienen que ver con efectivización de derechos- y organizando estrategias para que la experiencia escolar de estes niñes y adolescentes responda a las necesidades actuales de nuestra población de estas franjas etáreas.

Acompañamos las propuestas de integrar el actual año lectivo al próximo, a manera de “ciclos”, de manera de realizar la promoción de ambos años a finales del próximo.

Impulsamos la promoción de aquelles estudiantes que finalicen este año sus niveles educativos (primario o secundario) y, de existir contenidos pendientes que no pudieron enseñarse, los mismos se completen de manera extraordinaria en los primeros meses del año que les corresponda en el nivel siguiente.

Para ello, alentamos que las inscripciones de les estudiantes en las instituciones en las que comenzarán los nuevos niveles a los que vayan a acceder se realice durante los últimos meses de este año (octubre y noviembre) anticipando la futura pertenencia a dichas instituciones, para garantizar la certeza de continuidad de la trayectoria educativa y el vínculo con la nueva institución.

Es muy importante que el Consejo Federal de Educación tome con urgencia estas decisiones en torno a la evaluación y promoción del ciclo lectivo y anuncie pautas claras y concretas en torno a la articulación entre el 2020 y el 2021. Las escuelas necesitan contar con definiciones precisas para llevar tranquilidad al seno de la comunidad educativa, en tiempos de tanta incertidumbre y así poder acompañar estas situaciones de la mejor manera posible.

Por otra parte, creemos necesaria la implementación urgente de una propuesta específica para la revinculación educativa de todes aquelles niñes y adolescentes con les que el sistema educativo perdió contacto en estos meses, con participación activa de todos los actores sociales de la comunidad educativa. Esta revinculación, que tiene que tener en cuenta las posibilidades reales que este período permite, debe comenzar de manera inmediata y no esperar un regreso a los edificios escolares que puede postergarse en el tiempo para la gran mayoría de les estudiantes.

Al mismo tiempo, las autoridades jurisdiccionales y nacionales deben preocuparse en este tiempo en realizar las obras de infraestructura que posibiliten que las escuelas estén en las condiciones requeridas, tanto respecto de su equipamiento como de sus aspectos edilicios, en especial en lo referido a sus posibilidades de ventilación, calefacción, espacios sanitarios y provisión de agua potable.

La CADE manifiesta su satisfacción por la decisión del gobierno nacional de declarar a la conectividad como servicio esencial, felicita la presentación de la Plataforma Juana Manso, apoya el proyecto que se conoce como “Ley Carro-Osuna” que busca declarar la conectividad como Derecho Humano y reitera su posición en favor de políticas públicas que busquen solucionar la falta de equipamiento tecnológico de escuelas, docentes y estudiantes, entendiendo que contar con los dispositivos adecuados y con la conectividad garantizada, es la manera de que este derecho pueda hacerse efectivo en nuestro país.

Finalmente, queremos expresar nuestra total disposición para colaborar en aquellas iniciativas que sean pertinentes a nuestra coalición y a las diferentes organizaciones que la integran.

Mesa Nacional de la CADE