Nosotras, las mujeres, decidimos boicotear el sistema neoliberal y patriarcal mediante 8 acciones concretas y no violentas, desde el 8 de marzo de 2019.

Elegimos abandonar ciertos hábitos de consumo para desestabilizar la economía global y rechazar la violencia de género, social, laboral, física, verbal, religiosa, racial y ambiental de este sistema.

¡El movimiento feminista global tiene el poder de cambiar las cosas!

– No compremos en supermercados: responsables, entre otras cosas, de la desaparición de comercios locales y pequeños productores, de alimentos ultra-transformados y estandarizados, del elitismo de redes alimentarias alternativas.

– ​No hagamos retiros bancarios ni pagos electrónicos: los bancos especulan en los mercados en detrimento del medio ambiente y la dignidad humana, generan paraísos fiscales, etc.

– ​No compremos ropa nueva: ​ El 85% de las personas que trabajan en la industria textil son mujeres, no cuentan con protección de su salario ni seguro médico y ganan hasta $3 por día. Esta industria basa su estrategia de comunicación en una publicidad sexista, llena de estereotipos sobre la mujer, reduciéndola a un objeto de consumo.

– No usemos nuestro auto ni productos plásticos: La extracción de petróleo justifica la injerencia de las grandes potencias y las guerras; también fomenta la industria del plástico, una de las que más contaminan.

– Desconectémonos: La sobreproducción de dispositivos electrónicos requiere la extracción de minerales únicos, lo cual es costoso y devastador para la naturaleza y las personas. Además, con esto se explota a los trabajadores de los países más desfavorecidos.

– No compremos productos farmacéuticos y reconozcamos la importancia de la medicina natural: La industria farmacéutica es una de las más rentables e influyentes del mundo. Su acceso, subordinado a la capacidad económica de cada familia, crea una fuerte segregación social.

– ​ No consumamos agua embotellada: Las multinacionales se están apropiando y privatizando este recurso natural. El acceso al agua potable gratuita no está garantizado para todos.

– ​ No compremos productos derivados de la explotación animal: El consumo de productos de origen animal se rige a la misma lógica de explotación de los seres vivos y los reduce a una simple mercancía. También es la primera causa de deforestación: bosques enteros arrasados ​​para cultivar lo que alimenta al ganado de producción.

Por esto, el 8 de marzo, manifestémonos. ¡Liberémonos de la violencia del sistema neoliberal!

#WomenStopTheSystem #grevegeneraledesfemmes #8M
Contáctenos: ​ femmescontrelesysteme@gmail.com


Traducido del francés por Rosalía Briones