Por Alba Rueda¹/Fotos de M.A.F.I.A.

En el año 2016 se acercan a distintas organizaciones sociales Trans, Graciela y su hija, una niña de 8 años que pedía ser reconocida con su nombre propio: Tiziana. Ellas habían escuchado que en Buenos Aires se hizo el cambio de DNI a Lulú y buscaban que Tiziana accediera al mismo reconocimiento. Lo que no sabían era que Tizi es la primera niña trans en la provincia de Salta que apelaba a este derecho, y así se sumó a otres niñes de distintas provincias que acompañades por sus familias o aliades visibilizan nuevos escenarios sociales.

  

En todas partes crecen les niñes trans y no binarie que buscan y necesitan del respeto a sus derechos personalisímos, sociales y culturales, es decir, el derecho a su desarrollo personal sin violencia. Para asegurar el ejercicio de este derecho debe existir un reconocimiento en el ámbito escolar, así como su salud psicofísica integral y en todas las instituciones binarias y patriarcales que incorporen la diversidad de géneros y su expresión.

Argentina es modelo en el mundo por la Ley de Identidad de género pero también un país con profunda desigualdad hacia las personas trans. Les niñes y adolescentes trans no cuentan con políticas públicas integrales que protejan su libre desarrollo personal. Dependen de la estrategia de comunicar de sus familiares o amigas y de las organizaciones sociales. Mientras el Estado evita hablar de Tizi, nosotres la acompañamos porque todes necesitamos del respeto de los derechos más básicos para poder crecer.

  

Cerros que encierran, forman y clausuran,
nubes que cantan, mojan y siembran sobre cerros desgastados que caen lentamente sobre un pueblo latente.
Entre el viento, el agua y el sol, una niña se germina y crece.
Crece y duerme, camina y va a la escuela.
Duerme, baila contenta y despierta.
Ojitos que se asoman entre anteojos con polvo y barro.
¿Jugamos al elástico? Su mano tímida se alza para decir: mi nombre es Tiziana.
Las compañeras son reprendidas: no te juntes con él.
Tizi sonríe igual, pisa pisuela una se contenta diversa.
Un pueblo que emancipa te busca, te habita de a ratitos.
Y vos saltando entre piedritas creás nueva democracia, que te abraza y te abrazamos.
Salta alto y fuerte marroncita osadía,
salta alto y fuerte y cuidate que todavía nos acorralan y cazan.
Ronda de patitas te acompañan, no estás sola.
Estás bailando contenta y sonriente porque el futuro ya es tuyo.
Al presente lo peleamos nosotras, rabiosas travas enojosas cuando tocan nuestras niñas,
almendra de paz al mundo.


¹ Integrante de Mujeres Trans Argentina

El artículo original se puede leer aquí