Niños son retenidos en centros para inmigrantes en los Estados Unidos. La política de tolerancia cero hacia los inmigrantes ha hecho que muchos niños sean separados de sus padres cuando no tienen los documentos necesarios para inmigrar a los Estados Unidos.

La separación forzada de los hijos puede tornarse irreversible. Separar a los padres y madres de sus hijos es un acto cruel e inhumano y es una política de Trump que no tiene base legal para hacerlo, no fue admitido por el Congreso Americano.

El gobierno de Donald Trump ha realizado una verdadera criminalización de estas personas que intentan atravesar la frontera. Y, al llegar a Estados Unidos, son apresadas y procesadas. Los padres y madres que llevan a sus hijos, se les quita de forma dura y violenta. Todo esto para dar miedo a las personas que piensan en emigrar a Estados Unidos.

Ante las severas críticas realizadas por jefes de Estado de todo el mundo y también críticas internas, dentro de Estados Unidos, Donald Trump anunció este miércoles 20 que ya no se separaría a las familias. A pesar de ello se mantendría la política de tolerancia cero, los inmigrantes continuarían siendo procesados, pero las familias no serían separadas.

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La política de inmigración de Donald Trump es extremadamente dura. Se hace importante resaltar que la gestión del demócrata Barack Obama (del partido demócrata) también fue marcada por la deportación masiva de miles de hispanos.

Como publicó la redacción de Pressenza en Londres, “separar a los niños de sus padres es una forma de terrorismo realizado por el Estado Norteamericano”, y, “dicha práctica ya era realizada por dictadores sanguinarios, como Stalin (dictador que gobernó la antigua URSS), Pinochet (dictador de Chile), y Adolph Hitler (no necesita presentaciones)”.

por Vinícius Chamlet