Más de 260 mil personas fueron a la tercera feria nacional de la reforma agraria que tuvo lugar en la ciudad de São Paulo. El evento tuvo lugar los días 3, 4, 5 y 6 de mayo en el Parque del Agua Blanca en la zona oeste de la capital paulista.
El MST (Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra) conmemoró el éxito del evento que logró vender cientos de toneladas de alimentos. Y también contó con shows, venta de libros y hasta platos típicos de todas las regiones de Brasil.
La feria es una forma de promover la agricultura familiar que es responsable de la mayor parte de los alimentos que llegan en las casas de las brasileñas y de los brasileños. Los alimentos de la feria son orgánicos, por lo tanto, más sanos.
El Movimiento de los Trabajadores Rurales sin Tierra propone un modelo de agricultura que se opone al agronegocio, que se basa en el latifundio – grandes cantidades de tierra, y que tiene una producción de sólo una cultura, como las grandes plantaciones de soja y de caña de azúcar. Un modelo de plantación que se inició con la colonización de Brasil, que desde sus inicios concentró en las manos de pocos los terrenos, con el sistema de capitanías hereditarias.
El modelo del agronegocio, con grandes latifundios, maquinaria pesada y monocultura es una amenaza a las naciones indígenas, a los quilombolas (esclavos refugiados en quilombos). La naturaleza y en última instancia, la supervivencia de la especie humana, por promover deforestaciones, y volcar alimentos llenos de agrotóxicos.
El modelo promovido por el MST es una alternativa al modelo de los grandes latifundios. La reforma agraria -que está presente en la constitución de 1988, pero que nunca se concretó, es una condición para el desarrollo de Brasil.
