El diario The New York Times aseguró que los servicios secretos norteamericanos no reunieron elementos suficientes para inculpar a Al Assad.

Los servicios de Inteligencia estadounidenses no encontraron ninguna prueba concreta que implique al presidente sirio, Bashar al Assad, con un ataque químico presuntamente ocurrido el 21 de agosto en Siria, afirmó hoy el diario The New York Times.

La afirmación del diario llegó horas después de que el presidente estadounidense, Barack Obama, dijera que aún no tomó una decisión sobre cómo responder al supuesto uso de armas químicas, aunque señaló que una acción punitiva contra Damasco estará en el interés de su país.

También llegó cuando se espera que el gobierno de Obama dé a conocer, probablemente hoy,  un informe con detalles recogidos por los servicios de inteligencia y pruebas de que el ataque con armas químicas contra civiles de la semana pasada fue obra del gobierno de Al Assad.

En una entrevista con la televisión pública PBS, el mandatario norteamericano explicó no obstante que no tiene interés «en un conflicto con final abierto en Siria» o «una repetición de Irak» y que, si opta finalmente por un ataque, será «limitado».

Además, habló de la necesidad de una «respuesta internacional», pese a que su gobierno ya dio por hecho que no habrá respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU por la oposición de Rusia y China.

Hoy, The New York Times afirmó que las «pruebas» de que se registró una «masacre» en las afueras de Damasco son «innegables» por los testimonios de las víctimas y por la declaración de una «respetada» organización no gubernamental internacional, en referencia a Médicos Sin Frontera (MSF).

Sin embargo, el diario dijo que las «pruebas» que Estados Unidos dice tener y que se prepara a difundir -en base a conclusiones de sus servicios de inteligencia- no son «sólidas».

Las conclusiones de la Inteligencia no citan comunicaciones entre mandos militares sirios interceptadas por el espionaje norteamericano aunque sí se amparan en conversaciones de este tipo para descartar que el ataque fuera obra de una unidad militar del gobierno sirio que actuó por su cuenta incumpliendo órdenes.

The New York Times citó a fuentes gubernamentales que destacaron que conversaciones telefónicas de mandos sirios interceptadas el miércoles del ataque prueban que el bombardeo con armas químicas no fue obra de una unidad descontrolada.

Evaluando qué hacer

El presidente de Obama, y su secretario de Estado, John Kerry, no tienen hoy actividades públicas y se prevé que pasen el día evaluando una posible respuesta militar en Siria.

Obama mantendrá hoy varias reuniones a puerta cerrada en la Casa Blanca, según la agenda divulgada por la residencia presidencial.

Kerry hará lo mismo en el Departamento de Estado, también a puerta cerrada.

A diferencia del Reino Unido, Estados Unidos no aclaró si esperará las conclusiones de la investigación que un grupo de expertos de la ONU está llevando a cabo en Siria para ordenar un posible ataque militar.

Ese equipo de expertos informará de los primeros resultados de sus investigaciones al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, al dejar suelo sirio el próximo sábado.