«Brasil emerge de los últimos 10 años es un país más incluyente y sólido económicamente. El objetivo de mi Gobierno es profundizar estas conquistas», destacó Rousseff, según el sitio digital del diario Folha de Sao Paulo.

Puntualizó que la crisis financiera internacional aniquiló millones de empleos en naciones desarrolladas, pero aquí con las medidas adoptadas se hizo lo contrario, fueron creados cerca de 19,4 millones de puestos de trabajo y sacadas 16,4 millones de personas de la pobreza extrema.

Se trata de una de las pocas naciones del planeta que puede exhibir avances concretos en la última década con la implementación de programas sociales, enfatizó Rousseff al resaltar que 40 millones de brasileños ascendieran a la clase media, lo cual consideró como la mayor escalada en la historia de este territorio.

La presidenta, quien el martes próximo cumple dos años de mandato, explicó que estos avances muestran el combate a la desigualdad social, el cual constituye una de las prioridades de su Ejecutivo.

Al referirse al desempeño en este 2012, indicó que además de continuar con los programas sociales, la administración trabaja para lograr su competitividad de la economía nacional.

Finalmente, destacó que se ofrecieron concesiones para la construcción y modernización de carreteras y vías férreas, mejorar las operaciones en puertos y aeropuertos y reducir la tasas tributarias.