…arrojando a los manifestantes desde helicópteros, ¡atribuyendo los desbordes a “matones, presos, extranjeros e islamistas”!

Ante esta trágica situación, expresamos nuestra fuerte repulsa a:

– la violenta represión desatado por Gaddafi en contra de las legitimas demandas de los Libios.
– la hipocresía de gobiernos occidentales que, tras el apoyo dado a Gaddafi en los últimos años—apresurándose a venderle armas y tecnología nuclear—de nuevo le ven como sanguinario dictador.

Reiteramos:

– Nuestro apoyo a toda protesta no-violenta en Libia.
– La certeza de que los vientos de cambio que comenzaron soplando en Túnez no cesarán, llevando al derrocamiento en Libia de una régimen en el poder durante décadas y al más antiguo Jefe de Estado no-monarca de todo el mundo.

Rogamos que cese el derramamiento de sangre y que Libia comience una nueva época acorde con las más profundas aspiraciones de los pueblos.