Una ciudad de Milán que desbordaba, hombres, mujeres y niños, todos gritando que hay que hacer algo, que hay que empezar a moverse, gritando ¡Basta!

Pero también en Livorno. Una participación extraordinaria también en Toscana en las manifestaciones de defensa de la dignidad de las mujeres y contra el presidente del Consejo, implicado en el escándalo Ruby y Bunga bunga. Son por lo menos 23 las plazas ocupadas con la onda violeta, color que usan los italianos que están contra Berlusconi.

Dicen que Silvio Berlusconi ha causado un daño de imagen de inconmensurables dimensiones a todo el pueblo italiano y que valoran en por lo menos tres financieras el daño material: equivalente a 75 mil millones de Euro.

No quieren vivir en una Italia así de corrupta. Quieren cambiarla, cambiar la mentalidad de tantos italianos.

En Roma la manifestación *»Si no ahora cuando?»* se desarrolló en la Plaza del Popolo, donde nunca antes se había asistido a manifestaciones tan imponentes organizadas por la gente.