El Programa Mundial de Alimentos dijo que había alimentado a cien mil personas en Puerto Príncipe el lunes, tan sólo una parte de los tres millones de personas que necesitan asistencia. Hasta ahora, todos los esfuerzos de ayuda se han centrado en la capital, Puerto Príncipe, mientras que los habitantes de zonas periféricas como Carrefour y Leogane quedaron librados a sus propios recursos. Una importante escasez de combustible también dificulta las tareas de ayuda. Mientras que muchos haitianos huyen al campo, centenares de familias sin hogar se establecieron en un campamento provisorio en la plaza de Saint Pierre, en el distrito Petionville de Puerto Príncipe.

Las fuerzas militares de Estados Unidos tienen el control del único aeropuerto de Puerto Príncipe y son objeto de críticas por desviar a algunos aviones de ayuda. La organización Médicos Sin Fronteras denunció que no se permitió el aterrizaje de cinco de sus aviones con equipos y suministros quirúrgicos y que éstos fueron desviados a Santo Domingo, en la República Dominicana. Las fuerzas estadounidenses también hicieron regresar a un avión de ayuda francés que llevaba un hospital de campaña. El Presidente venezolano Hugo Chávez acusó al Presidente Barack Obama de militarizar la ayuda a Haití.

Dijo Hugo Chávez: *“Señor Obama, mande hospitales de campaña, en vez de mandar tantos soldados, para qué tantos soldados con ametralladoras y fusiles, médicos, enfermeros, enfermeras, hospitales, equipos médicos, generosamente”*.

En un viaje que realizó a Puerto Príncipe, la Secretaria de Estado Hillary Clinton defendió la respuesta de Estados Unidos.

Dijo Hillary Clinton: *“Quiero asegurar al pueblo de Haití que Estados Unidos es su amigo, socio y defensor, y que trabajaremos con su gobierno bajo la dirección del Presidente Preval para ayudar en todo lo que podamos”*.

El Presidente haitiano Preval viajó el lunes a Santo Domingo para celebrar una reunión de emergencia con el fin de tratar el financiamiento de los esfuerzos de recuperación. El Presidente dominicano Leonel Fernández afirmó que la reconstrucción de Haití insumiría al menos diez mil millones de dólares durante los próximos cinco años. Mientras tanto, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, visitó Puerto Príncipe el domingo.

Dijo Ban Ki-moon: *“Esto no tiene precedentes. Se trata de uno de los desastres naturales más grandes y graves de las últimas décadas. Para las Naciones Unidas representa la mayor pérdida individual en la historia de su organización. Eso realmente agrava todo”*.

Siguen trascendiendo historias de personas que sobrevivieron luego de haber permanecido atrapadas durante días. El viernes, un equipo australiano de televisión ayudó a los rescatistas a salvar a una niña de dieciocho meses, de nombre Winnie. El equipo televisivo y los rescatistas movieron los escombros pieza por pieza para llegar a Winnie, que estaba atrapada en una casa derrumbada. La niña fue hallada después de que los vecinos escucharan los llantos de un bebé procedentes de los escombros. Una vez rescatada, fue entregada a su tío, Franz, que dijo que los padres de la niña habían muerto en el terremoto. Deiby Celestino desempeñó un importante papel en el rescate de Winnie.

Celestino declaró: *“Ella es la heroína porque luchó durante tres días. Sigue viva. Fue una gran experiencia, y el hombre que está allí fue quien realmente la salvó, no yo”*.