En el medio de la Cordillera de los Andes, a pocos kilómetros del pico más alto de Occidente, el Aconcagua, y muy cerca del Monte Tupungato, se emplaza el Parque de Estudio y Reflexion Punta de Vacas.

Alli se dieron cita cerca de 1500 personas provenientes de distintas latitudes del mundo: hindúes, africanos, españoles, chilenos, argentinos, italianos, checos, peruanos entre tantos otros se reunieron para celebrar el inicio del nuevo año 2010 y el anticipo de lo que será el cierre de la Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia el próximo 2 de enero.

El saludo fue dado por Silo, fundador del Humanismo Universalista e inspirador de la Marcha Mundial que propone el desarme nuclear. Silo dijo que se debería realizar un festejo por cada calendario cultural y que en ese encuentro ya se está gestando el calendario de la futura Nación Humana Universal, a pesar del desastre de las guerras y la violencia. Las palabras fueron luego traducidas por representantes de 18 países distintos, cada uno en su idioma: filipino, italiano, checo, ruso, húngaro, inglés, árabe, hebreo, alemán, francés, griego, swahili, hindi, tamil, tagalog, finlandés y holandés entre otros.

En el Parque de Estudio y Reflexión Punta de Vacas tendrá lugar el próximo sábado 2 de enero el evento de cierre de la Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia. La jornada comenzará a las 18 y contará con los testimonios del equipo internacional de activistas que recorrió más de 90 países del mundo concientizando sobre el fin del armamentismo nuclear.