Continuarán hacia el Campamento 2, ubicado a 4.500 mts. de altura y bajarán en el mismo día para aclimatarse, de manera de poder luego arremeter hacia la cima y clavar allí la bandera de la Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia.

Contando con la asistencia de montañistas turcos del lugar, pastores en su mayoría, han compartido con ellos el pan, cebollas y tomates secos, en una noche en que llovió mucho, con truenos y relámpagos.

La montaña, una de las más singulares del mundo por su importante carga mítica, espera a los escaladores que luego de esta odisea se proponen subir la Cordillera de Los Andes para llegar el 2 de enero hasta el Parque Punta de Vacas, donde cocluirá la Marcha Mundial.