Por Malucha Pinto

Sin duda tu partida, Fidel, es la partida de una etapa de nuestras vidas.

Para mi generación y para mí, en particular, la muerte de Fidel es un viento fuerte que mueve la vida completa. Estos días los he pasado en viajes profundos. Esos viajes en los que recorremos, sobre el lomo de algún unicornio perdido, nuestra propia historia.

Crecí amando esa revolución, a los barbudos que, junto a su pueblo, encarnaron el sueño de la libertad, la justicia y el socialismo. Mi corazón se estremeció y emergieron mariposas y luciérnagas con las frases que abrían nuestro universo: Desde la ternura siempre, por ejemplo…. y el calor húmedo y los cuerpos gozadores, el permiso para orgasmos y deleites y la salsa y ese cine y los trovadores rumbeando por el mundo sus anhelos de mañana.

Cuba, liderada por Fidel, fue una inspiración para miles de jóvenes latinoamericanos que buscábamos nuevos caminos alternativos a la bestialidad del capitalismo hoy entronado. Ese pueblo azotado por la implacabilidad norteamericana en su afán de comerse el mundo entero y que, sin embargo, triunfaba en las lides deportivas, era una estrella que brillaba cuando se hablaba de educación, salud, cultura al alcance de una nación completa. (Soy testigo de sus magníficos festivales de teatro, cine, boleros, danza.) Ellos, sin tener nada, eran los primeros que partían a solidarizar con los pueblos del mundo cuando así se necesitaba. Y yo, y nosotros queríamos partir con ellos mecidos por el sueño de la hermandad y el amor.

Marchamos por Cuba tantas veces….y nuestras banderas brillaban en el cielo queriendo decirles a los cubanos que estábamos con ellos.

Fui a ver a este Fidel inmenso al Estadio Nacional cuando vino en los tiempos de la Unidad Popular y fui testigo del fervor y la pasión que él suscitaba. y no era solo él, sino el rugido de la vida comprendida en el abrazo con los otros, con las otras, comprendida en ese NOS-OTROS que tanto nos cuesta.

Cuba fue por años el bastión moral de tantos y tantos…. Cuba parecía decirnos que era posible otro modo de estar en la tierra.

Con el tiempo viajamos a Cuba muchas veces por distintas razones y abrazamos a ese pueblo bello, tremendo, resistente, ese pueblo único en el mundo.

Sin embargo, también en el tiempo, con dolor infinito y sin querer ver, porque muchas veces no queremos ver y nos sumergimos en las mil explicaciones que no explican nada, vi un modo jerárquico, no participativo, patriarcal, ferozmente patriarcal, excluyente, un modo oscuro de ejercer el poder. Vi, también…. me cuesta decirlo….cómo se vulneraron los derechos humanos.

El tiempo irá poniendo las cosas en su lugar.

No es momento de análisis para descubrir las luces y las sombras de la Revolución Cubana, porque sin duda hay mucha luz…. y también sombras…. Se irá haciendo de a poco cuando podamos mirar desde arriba, sin apasionamientos y sin tanta inmediatez

Yo he ido recorriendo mi proceso en relación a mis sueños para la humanidad y los caminos para llegar a ellos. Me he ido transformando ante la brutalidad de la historia. Nunca más la lógica del enemigo… siempre la cultura de los derechos humanos y la vida, construyéndose en cada inhalación y exhalación, nunca más la jerarquía, siempre la no-violencia activa. Hoy, para mi, es la equidad como bandera, la participación horizontal, los pequeños gobiernos comunales, la contención del abrazo en todas sus formas,la inclusión de lo indomesticado, el arte floreciendo como modo de construir países, la escucha en la sensibilidad, el retorno a lo humano… y aunque distinto, en todo ello late la inspiración de esa quimera que abrió esa Revolución en sus inicios e igual tengo tanto que agradecer a este Fidel tremendo y al pueblo cubano.

Feliz viaje Fidel Castro

Te encontrarás con los Ernestos, los Camilos y tantos otros que no alcanzaron a ver el socialismo real en Cuba. Tendrán mucho que conversar, evaluar, comprender, rectificar. Después de esa conversación de la que, sin duda, quisiera ser testigo, asómate en los sueños para contarnos qué concluyeron y cómo ven las cosas hoy por hoy.

Un abrazo igual porque el amor es incondicional…

Aquí te dejo una canción que Silvio te dedicó…. me gusta…. me identifica y hoy te la canto a ti en tu viaje a las tierras del cielo.