Al final de la proyección, varios asistentes se acercaron a agradecer a los autores
 

‘Compañeros de viaje’, un documental sobre el acompañamiento a enfermos al final de la vida, ha sido presentado este 19 de octubre en Parques de Estudio y Reflexión Toledo.

 

En una sala repleta de silenciosos y emocionados espectadores, se ha proyectado este documental imprescindible para profesionales de la salud y  familiares o amigos de personas prontas a partir.

 

Los autores del mismo, la psicooncóloga Elsa Sierra y el director de documentales Álvaro Orus, han mostrado el resultado del “trabajo en equipo con personas del ámbito de la salud, familiares que acompañaron a sus seres queridos y algunos enfermos”,  que dieron su testimonio antes de partir, sobre lo interesante que estaba resultando esa etapa del final de su vida.

 

Se trata de una serie de entrevistas a profesionales de la salud que trabajan en el campo de los cuidados paliativos, a ‘compañeros de viaje’ de personas que ya han partido y que vivieron esa etapa de sus vidas poniendo lo mejor de sí mismos para facilitar la partida a sus seres queridos, y a tres enfermos que agradecen ante la cámara lo fundamental que es el apoyo de unos y otros en esos últimos días.

 

“Toca todos los aspectos a tener en cuenta en estas situaciones -se dice en la sinopsis de este trabajo-, desde los cuidados físicos, la atención a aquellos aspectos que el enfermo quiere ‘cerrar’, posibles reconciliaciones, el sentido de la vida, etc. El documental ha sido concebido como una especie de manual para el acompañante, de manera que le sirva para comprender la situación, sus etapas y también para darle herramientas, información y testimonios que le puedan ser útiles. También este documental puede tener una segunda y tercera lecturas. En clave social, se trata de una reivindicación del papel tan necesario de los equipos de cuidados paliativos en está época en que se están recortando las prestaciones de la sanidad pública y, en un sentido más existencial o filosófico, se trata de cambiarle el rostro a la muerte”. Ojalá, como un profesional sanitariocomenta en el documental, los cuidados paliativos sean considerados como uno más de los Derechos Humanos.

 

En esta sociedad, donde este tema es tabú y se hace un “círculo de silencio” alrededor del enfermo, de tal modo que éste queda condenado a vivir en soledad sus temores y sus anhelos ante el inminente fallecimiento, se hace fundamental afrontar el tema de la partida de un familiar o la propia de un modo abierto, «permitiendo experimentar que ese periodo puede convertirse en un tiempo de compartir, en un tiempo de crecimiento y de coherencia interna”, según relataba Elsa Sierra.

 

Al finalizar la proyección, algún asistente comentaban «¡cuánto me hubiera ayudado este documental ante la muerte de mi padre!», por ejemplo. Eso busca, ayudar… y lo consigue.