la reunión del Consejo de Defensa de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), finalizada el 27 de noviembre en Quito, concluyó con una resolución que establece medidas de cooperación, confianza mutua, compromisos de respeto a las soberanías y no intervención entre los países correspondientes a la región.

El documento consta de tres grandes partes: Descripción de medidas de fomento de la confianza; Problema mundial de las drogas; y Disposiciones finales y transitorias. La primera parte, a su vez, está dividida en cinco capítulos y estos en medidas puntuales.

La descripción de las medidas de fomento de confianza aborda el intercambio de información militar y transparencia; actividades militares intra y extraregionales; medidas en el ámbito de la seguridad; garantías y cumplimiento y verificación.

Parte medular del documento es la referida a las garantías, entre las cuales establece la proscripción a los miembros de UNASUR del uso o amenaza del uso de la fuerza, cualquier tipo de agresión militar o amenazas a la soberanía e integridad territorial de otros Estados.

Los países del bloque regional garantizarán formalmente que los acuerdos de cooperación en defensa que impliquen algún grado de presencia en sus territorios de personal, equipos o armamento de Estados de la región o extrarregionales no serán utilizados contra ningún otro país.

Esos acuerdos, precisa, incluirán una cláusula expresa que asegure respeto a los principios de la igualdad soberana de los Estados, su integridad e inviolabilidad territorial, no intervención en sus asuntos internos, y mantener la región libre de armas nucleares.

La resolución, se negocia por los ministros de Relaciones Exteriores y Defensa desde la reunión celebrada en Quito el 15 de septiembre pasado, por mandato de la Cumbre del 28 de agosto en Bariloche, Argentina, y concluida la víspera en Quito, aunque quedan temas pendientes.

A pesar de que la ausencia de las altas autoridades colombianas impidieron acordar un párrafo de condena a la instalación de bases extranjeras en la región, el documento aprobado justifica el balance exitoso de la reunión hecho por el canciller ecuatoriano, Fander Falconí.

Fuente: Prensa Latina